Por la escasez de precipitaciones, no hay mal olor. También disminuyó la erosión de las taludes y las construcciones que sufrieron la fuerza de la corriente todavía se mantienen en pie.
Quito lleva 46 días sin lluvia y el caudal del río Machángara también se mantiene bajo. Los vecinos del barrio El Rosario de la Vicentina Baja (San Pablo-oriente de Quito) estiman que está seis metros por debajo del nivel que alcanza en época de lluvia.
Este río soporta la mayor parte de las descargas del sistema de alcantarrillado de la ciudad.
Con el caudal bajo, no hay mal olor, disminuyó la erosión de las taludes y las construcciones que sufrieron la fuerza de la corriente todavía se mantienen en pie.
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🔴 #ENVIVO | Los vecinos del barrio La Lucha de los Pobres, en el sur de #Quito, reclaman por el servicio de agua potable. Ya van tres semanas sin el suministro. Apenas lo reciben pocas horas y no se abastecen.
— Comunidad Quito (@comunidadquito) September 23, 2024
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La visita al barrio El Rosario de la Vicentina Baja coincide con el recorrido de los técnicos del Municipio que realiza un estudio topográfico para la construcción de muro de protección que permitían evitar reducir los riesgos cuando llegue el invierno.
Con el Machángara calmado, los vecinos tienen un respiro pero esperan que en esta época seca se aproveche para concretar las obras de protección pendientes.
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