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Señales para reconocer el estrés causado por las fiestas de Navidad y Fin de Año y consejos para prevenirlo.
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Imagen referencial de una persona que sufre de estrés en Navidad.( )
La Navidad es una época que, para muchos, está llena de alegría y celebraciones, pero también puede ser fuente de un gran estrés. Entre los compromisos laborales, las compras de regalos, las cenas familiares y las expectativas sociales, es fácil caer en lo que los expertos denominan agotamiento navideño o “burnout”, Alexis Alderete, licenciado en Psicología de la Universidad del Salvador, indica que:
El estrés que se genera por organizar las cenas de Navidad y Fin de año, comprar regalos, ambientar la casa, genera una presión que excede a veces las capacidades de afrontamiento y las herramientas para llevar adelante la titánica tarea de poder con todo lo que nos hemos propuesto”
Este fenómeno afecta a quienes intentan cumplir con todo sin tomarse un respiro. Esto causa que las personas desarrollen ansiedad, irritabilidad y malos tratos hacia sus seres queridos.
“El impacto no solamente lo sufre la persona que asume este rol, sino también su entorno, porque se vuelve más exigente con sus familiares y amigos, lo que la hace perder de vista que las fiestas deben ser un momento de disfrute y conexión, más que de responsabilidad”, completó el experto.
Síntomas del estrés navideño
La psicóloga Ilana Lane dijo a HuffPost UK que los signos físicos y psicológicos se manifiestan a través de las siguientes señales.
Fatiga física y mental
Uno de los primeros síntomas del agotamiento navideño es la sensación constante de cansancio. El estrés y las preocupaciones relacionadas con las festividades alteran el sueño, lo que empeora la fatiga.
Ansiedad y sensación de estar al límite
Las exigencias de organizar todo a la perfección generan ansiedad. Esta presión por cumplir con las expectativas propias y ajenas puede hacer que las personas se sientan abrumadas.
Irritabilidad y explosiones emocionales
El agotamiento emocional también se manifiesta con estallidos de ira, frustración sin una causa aparente. Las tensiones acumuladas hacen que sea difícil controlar las emociones.
Dificultad para disfrutar de las festividades y sentimiento de culpa
Las expectativas de tener unas fiestas perfectas pueden hacer que las personas se sientan culpables si no logran cumplirlas. Además, los gastos de las festividades pueden generar remordimientos y tristeza, afectando aún más el estado de ánimo.
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Consejos para reducir el estrés y disfrutar las fiestas
El primer paso para evitar el agotamiento es recordar que las festividades son temporales. Según el licenciado Alderete, la clave está en ejercitar la flexibilidad y recordar que lo más importante es compartir momentos y disfrutar de la compañía de la familia.
Delegar tareas
Un error común es tratar de hacer todo por uno mismo. Delegar responsabilidades a familiares y amigos, fortalece la confianza mutua y alivia a la carga de trabajo.
Planificación anticipada
Evitar las compras y preparativos de último minuto es fundamental. Comienza con tiempo para evitar el estrés de última hora y asegurarte de que todo esté listo sin prisas.
Establecer límites
Aprender a decir no es una habilidad valiosa para evitar compromisos innecesarios. No te sientas presionado a cumplir con todas las invitaciones o expectativas.
Tomarse momentos de descanso
Reservar momentos para desconectar, ya sea leyendo, hacer ejercicio o solo descansar. El autocuidado es vital para mantener el bienestar físico y mental.
Practicar técnicas de relajación
Realizar ejercicios de respiración o meditar unos minutos al día puede hacer una gran diferencia en la gestión de las emociones.
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