Una nueva ola de tornados en Estados Unidos deja al menos once muertos

Al menos once personas han muerto este viernes por una nueva ola de tornados en Estados Unidos y una serie de fuertes tormentas que afectaron a varios estados del Sur y Medio Oeste del país.

Cuatro fallecidos vivían en el estado de Arkansas, donde hay además cerca de 50 personas hospitalizadas, según las autoridades estatales. La gobernadora del estado, Sarah Huckabee Sanders, ha declarado el estado de emergencia y ha desplegado a la Guardia Nacional para colaborar en las labores de rescate.

Otros tres fallecidos fueron identificados en el condado de Sullivan, Indiana, según informa la cadena CBS, citando a los servicios locales de emergencias.

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El octavo fallecido se ha dado en el estado de Illinois, al colapsar el techo de un recinto de conciertos en la localidad de Belvidere. En el momento del accidente había 260 personas dentro del edificio, y hay 28 personas hospitalizadas, cinco de ellas con pronóstico grave, según han confirmado las autoridades de la localidad. Los otros fallecidos se confirman en otras zonas.

Hay además más de 300.000 personas sin electricidad en este momento, según reporta la cadena CNN, y tres estados más se han sumado a la alerta por posibles tornados en sus territorios, con las autoridades federales pidiendo a los ciudadanos que permanezcan en lugares seguros.

Según el centro de predicción de tormentas, se han contabilizado por el momento 30 tornados distintos: 12 en Arkansas, ocho en Iowa, siete en Illinois, dos en Tennessee y uno en Misisipi, a donde se ha desplazado este viernes el presidente Joe Biden para prestar su apoyo por las tormentas que asolaron el estado esta semana y dejaron al menos 26 muertos.

El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, se encuentra este fin de semana en Misisipi, para evaluar en persona la devastación provocada por los tornados del pasado fin de semana, y anunció la cobertura federal durante 30 días de los enormes daños materiales causados por la "supertormenta".

En su visita a la localidad de Rolling Fork, la más dañada en el estado, ha asegurado que hará "todo lo que esté legalmente en mi poder para ser de ayuda a toda la gente de esta comunidad".

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"Hemos autorizado cheques para las personas que perdieron sus hogares, ya sean propietarios o rentistas, para que paguen las cosas que no están cubiertas por el seguro, como puede ser residencias temporales, reparaciones en las casas para aquellas que aún siguen en pie, o para reemplazar bienes personales, como muebles, electrodomésticos y vehículos", ha asegurado.