Una peruana, con la misma enfermedad de Paola Roldán, lucha por la muerte digna en su país

María Benito fue diagnosticada con esclerosis lateral amiotrófica (ELA), una enfermedad degenerativa e incurable que causa una parálisis corporal progresiva y mortal. Hace 10 años, antes de antes de que su cuerpo dejara de responderle a causa de su padecimiento, mantenía una vida saludable y normal, pero ahora busca una muerte pacífica. Tras haberle sido concedido su derecho de negarse a cualquier tratamiento médico en el hospital de Perú en el que se encuentra, surgieron nuevas complicaciones.

Esta enfermedad, que afecta a cuatro de cada 100 mil habitantes, comenzó con extrañas palpitaciones en su brazo izquierdo. Malestar que se extendió por su cuerpo hasta que un día dejó de poder cargar las bolsas de las compras, de abrir su monedero e incluso de amarrarse los zapatos. Ahora, está completamente inmóvil.

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María Benito, que solo se puede comunicar a través del movimiento de sus ojos en una pantalla, buscó adquirir su derecho de una muerte pacífica. Por esta razón, el viernes 26 enero, en una audiencia judicial intervino de manera remota para defender su decisión.

Con la ayuda de la activista Ana Estrada, símbolo de la eutanasia en Perú, sus palabras fueron difundidas a través de redes sociales después de que su petición de un suicidio asistido no haya sido escuchada.

“A nadie le hago daño ni mal alguno. Es la única esperanza que tengo. Usted no se imagina cómo es pasar un día sin poder hacer nada, solo mover los ojos y esperar la buena voluntad de las personas que me atienden”, comentó Benito.

La decisión final falló a favor de Benito, a la que se le concedió el derecho de negarse a los tratamiento que prolongarán su vida. O sea, el derecho a negarse el estar conectada a un ventilador mecánico. La decisión se aprobó al no considerarse como eutanasia, pero como el rechazo de un servicio médico.

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A pesar de que se aprobó la decisión de que Benito puede rechazar tratamiento médico, un nuevo inconveniente surgió. La única entidad que puede autorizar desconectarla es la Unidad Social de Salud (EsSalud), sin embargo, el jefe de dicha unidad, Luis Carrillo Velásquez, señaló que ningún médico de su área lo llevará a cabo porque todos se opusieron.

“Eso es abiertamente ilegal. No existe objeción de conciencia en bloque. Además, lo ha hecho sin consultar a los médicos, porque hay uno que sí está dispuesto”, defiende Estrada.

La juez a carso del caso ordednó mediante una resolución este febrero, que EsSalud cumpla

En medio de este choque de posiciones al interior del sistema de salud, la juez a cargo del caso ha ordenado mediante una resolución que EsSalud remedie este fallo en un plazo de cinco días a partir del viernes 23 de febrero.

Paola Roldán Espinosa, ciudadana ecuatoriana, también peleó por su derecho a una muerte digna al quedarse inmóvil por la misma enfermedad que Benito, la esclerosis lateral amiotrófica (ELA).

Después de más de 180 días de una batalla legal para recibir su derecho a la eutanasia, Paola recibió este 7 de febrero el favor de la Corte Constitucional para aceptar su demanda para conseguir una muerte pacífica. Con lo que logró despenalizar la eutanasia en Ecuador.