"Todos los días hay balacera": el testimonio de un residente de la cooperativa Balerio Estacio, en Guayaquil

La cooperativa Balerio Estacio, perteneciente al Distrito Nueva Prosperina, en el noroeste de Guayaquil, ha sido noticia por la violencia criminal desatada en la zona en los últimos días. Recientemente, allí, fueron asesinadas cuatro personas, de los fallecidos dos eran víctimas colaterales, según identificaron las autoridades.

Pero, lo cierto es que la cooperativa no fue siempre así, violenta. Micaela Ortíz (nombre protegido) está por cumplir 21 años viviendo "en la Balerio", allí reside junto a su esposo, hijos y nietos. Ella cuenta que desde hace dos años comenzó todo; "antes de que pasara la cuarentena, no era así, era tranquilo", recuerda. Ahora las extorsiones y las balaceras son parte de la dinámica de ese lugar que, señala Ortíz, ha provocado que pasen "encerrados".

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Pero, ¿qué está pasando? Según pudo conocer Ecuavisa.com por una fuente policial, "la mayoría de (comerciantes) en la entrada de Balerio son extorsionados, todos los locales están pagando entre 1 500 y 2 000 dólares", aseguró el policía quien pidió no revelar su nombre por seguridad. Además, señala otro punto importante que las muertes violentas se debe a la disputa del territorio, "los de Socio Vivienda quieren entrar a la Balerio, Los Tiguerones".

Ortíz no sabe bien de las bandas que operan el lugar donde vive, pero lo que sí conoce de primera mano es cómo ha cambiado el lugar donde formó una familia hace dos décadas. Este es su testimonio.

Micaela Ortíz (nombre protegido) vive con un temor constante; que un día a su casa lleguen las 'vacunas'. Es que a las tiendas y a los locales a los que ella acudía, ubicados en la avenida principal de "la Balerio", los extorsionadores ya dejaron panfletos, cobrándoles, dice.

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Pero, además, de ese miedo también se une el de la violencia que cada vez está más cerca de su casa. Entre las 19:30 y 20:00, cuando su esposo llega del trabajo, dice, incrementa su preocupación porque "en la principal hay todos los días balaceras, estamos en peligro por si cae una bala perdida", lamenta a través de la línea.

De hecho, lamenta que algunos amigos de sus hijos ya han sido asesinados, Micaela señala que no conoce la razón, aunque el rumor los vincula al microtráfico en la zona, "algunos conocidos los han matado".

Entre las medidas de seguridad que ha tomado, están no salir en las noches, ni tampoco asomarse a la ventana cuando escuchan "bala". Sin embargo, algunos de sus vecinos ya se han ido a otras provincias:

Nada de lo anterior le quita tanto el sueño como la seguridad de su nieto y de sus hijos. Ambos estudian en la escuela Tránsito Amaguaña, donde el pasado 10 de enero de este año, tres piernas humanas que habían sido calcinadas fueron halladas fuera de la unidad educativa.

En ese entonces, los padres solicitaron la presencia permanente de policías en esta escuela. Por su parte, el exgobernador del Guayas, Lorenzo Calvas, prometió atender la situación. Pero, tres meses después, a una cuadra de la escuela, otro cuerpo fue hallado.

Ante esta situación, la residente dice que "los chicos a veces no quieren ir al colegio". De hecho, relata un episodio escalofriante que vivió su nieto:

El problema es que no hay otro colegio cerca de la zona, al menos, no público, dice, "nuestros hijos son los que corren más peligro, porque ellos estudian en la tarde y los policías deberían estar cuidando a los estudiantes".

De acuerdo a la Policía Nacional la unidad educativa sí es parte del Plan Escuela Segura y el resguardo se mantiene a la hora de ingreso y salida de los estudiantes.