29 may 2024 , 10:55

Esto es lo que no tienes que decir a una persona con cáncer

La manera de dirigirse de cierta forma a los pacientes con cáncer puede tener repercursiones negativas.

   

MADRID, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -

Frases hechas y motivacionales como 'no te preocupes', 'todo irá bien' o 'estoy contigo', así como el lenguaje bélico que aún se emplea con frecuencia en los medios de comunicación a la hora de hablar de cáncer o de dirigirse a un paciente con cáncer "generan más presión a los pacientes", afirma la psicooncóloga en MD Anderson Cancer Center Madrid, Fátima Castaño.

Lea: Protegiendo tu piel: importancia del monitoreo y prevención del melanoma

"Tenemos que alejarnos del lenguaje de la lucha y la batalla, del perdedor y el ganador, que sitúa a los pacientes en una posición psicológicamente negativa. Seguimos escuchando frases hechas con las que pacientes y familiares se sienten escasamente identificados y no reflejan su realidad", subraya la experta, que pide que se eviten estas frases y actitudes.

Imagen referencial: Mujeres abrazándose.
Imagen referencial: Mujeres abrazándose. ( )

Puede interesarle: Cáncer de ovario: estos son los síntomas a tomar en cuenta para su detección temprana

Recuerda que el diagnóstico no solo supone un importante impacto a nivel emocional para los pacientes, sino también para su entorno; y en ambos casos el miedo, incertidumbre, rabia o tristeza son emociones que forman parte del proceso y que varían su intensidad a lo largo de la enfermedad. En muchas ocasiones, las personas cercanas al paciente oncológico no saben cómo actuar ni cómo dirigirse a ese ser querido durante el proceso.

En este sentido, la especialista también insiste en evitar la conocida como tiranía del positivismo. "El exceso de exigencia sobre la positividad puede influir y generar malestar en los pacientes porque pueden llegar a pensar que la tristeza o el miedo, normales por las circunstancias, están relacionados con su enfermedad o un posible empeoramiento; que su positivismo está relacionado con la mejoría médica", explica.

No obstante, asegura que una actitud positiva ayuda a afrontar el proceso con mayores recursos, a mejorar la calidad de vida y a prevenir trastornos del estado de ánimo. Sin embargo, prosigue, esta tiranía del positivismo es uno de los elementos que conduce en muchas ocasiones a los pacientes a consulta.

"En muchos casos, te explican que sienten que no lo están haciendo lo suficientemente bien porque están transmitiendo tristeza a sus familiares, lo que les genera una presión sobreañadida, se sienten culpables y no se permiten transmitir emociones negativas, lo que les dificulta el pedir ayuda y puede conducir a un mayor aislamiento", añade.

Castaño sostiene que sentir emociones negativas es "inevitable" y que también es necesario, "exteriorizarlas" ayuda a drenarlas y a encontrar apoyos para sobrellevarlas. "De hecho, esto es natural y saludable. (...) Debemos permitir a los pacientes sentir y expresarse" agrega, incidiendo en que este paso contribuye a acercarnos a ellos, a buscar recursos y a sentirnos más conectados.

En su opinión, "las emociones negativas son mal llamadas negativas; son emociones que no son agradables, pero que, forman parte del proceso de adaptación psicológico que favorece la aceptación y el afrontamiento de una situación de crisis vital como puede ser el cáncer".

Imagen referencial: Acompañamiento familiar durante consulta médica.
Imagen referencial: Acompañamiento familiar durante consulta médica. ( )

PRINCIPALES ESTRATEGIAS

Independientemente del caso, la psicooncóloga destaca la importancia de comenzar cualquier interacción con el paciente mediante la escucha activa y la realización de preguntas para comprender y conocer sus necesidades. "Cada persona es única. Tenemos que ajustar nuestro estilo comunicativo a sus propias circunstancias, condiciones y personalidad. Esta estrategia ayudará a que sientan a sus familiares más cercanos y presentes", explica.

En el caso de los pacientes que se encierran en sí mismos, la psicooncóloga asegura que es importante respetar su espacio e idiosincrasia. "Hay que buscar otras maneras de comunicarse, no solo es válida la comunicación verbal sino también la no verbal. Mantenerlos informados sobre los posibles recursos, ayudas y necesidades en el proceso de enfermedad será de gran ayuda para ofrecer el mejor acompañamiento", añade.

La psicooncóloga de MD Anderson Madrid recomienda en estos casos escuchar y no dar por sentado; hacer preguntas abiertas como: "¿Cómo te sientes? ¿Qué necesitas? ¿Qué te ayudaría en este momento?". Identificar circunstancias que sean idóneas para la comunicación y preparar esos momentos comunicativos; y ponerse en el lugar del ser querido y entender que no todas las personas se benefician de expresar lo que sienten en cada momento.

Además aconseja mantener una conversación teniendo en cuenta que es un contexto complicado y trabajar como equipo.

Por otro lado, a la hora de comunicarse con un menor con familiares diagnosticados de cáncer, la especialista asegura que es "crucial explicarles lo que sucede, así como dar la información adaptada a sus capacidades de comprensión para ayudarles a entender los cambios que puedan surgir en el entorno familiar".

De esta forma, apunta, podrán entender la situación y se sentirán parte del proceso. "Por ello, no es recomendable ocultar la información porque puede generar sentimiento de culpa, incomprensión y percepción de aislamiento y soledad", concluye.

Temas
Noticias
Recomendadas