Los mejores alimentos para combatir la acidez

La acidez estomacal es un trastorno común que se caracteriza por el retorno de los ácidos estomacales al esófago, generando molestias e irritación. A menudo es difícil de diagnosticar debido a la diversidad de síntomas que pueden confundirse con otras afecciones.

Entendiendo la inflamación desde el beneficio hasta el riesgo

Los pacientes suelen describirlo como un fuego interno en el abdomen, acompañado de dolor de pecho, eructos, tos y malestar general.

La acidez estomacal, resultado del regreso del ácido gástrico al esófago, puede atribuirse a diversos factores, incluyendo una dieta poco saludable, consumo excesivo de alimentos picantes o grasos, alcohol, tabaquismo, obesidad y condiciones médicas subyacentes.

Esta condición puede provocar molestias, dolor y daño en el revestimiento esofágico si no se trata adecuadamente.

Los síntomas del reflujo, que van desde dolor y malestar abdominal hasta dificultad para tragar e inflamación de las cuerdas vocales, pueden variar en intensidad y frecuencia.

El dolor, a menudo descrito como ardor en el pecho, puede irradiarse hacia el cuello o la garganta, dificultando las actividades cotidianas.

El tratamiento de la acidez estomacal puede implicar cambios en el estilo de vida, como modificar la dieta y evitar factores desencadenantes como el alcohol, la cafeína y los alimentos grasos o picantes.

Además, el uso de medicamentos puede ser necesario para controlar los síntomas en algunos casos, aunque la cirugía es una opción poco común.

La investigación publicada en la National Library of Medicine de Estados Unidos ha demostrado que la genética desempeña un papel significativo en el desarrollo de la acidez estomacal, con un estudio que sugiere que hasta un 31% de la predisposición puede estar influenciada por factores genéticos.

Además, los hábitos alimenticios y el estrés pueden contribuir al aumento del reflujo ácido.

En términos de dieta, ciertos alimentos pueden empeorar los síntomas del reflujo, como el chocolate, la menta, alimentos grasos y picantes, así como bebidas alcohólicas, con cafeína o carbonatadas.

Por el contrario, otros alimentos pueden ayudar a aliviar el malestar, como el zapallo, apio, brócoli, espárragos, banana, manzana, avena, calabaza, patata, sandía, pera, piña, melocotón, papaya, higo, melón y almendras.

Estos alimentos, ricos en fibra, vitaminas y minerales, actúan de diversas maneras para controlar la acidez estomacal, alcalinizar el pH y promover una digestión saludable.

Incorporarlos en la dieta puede contribuir significativamente a reducir los síntomas del reflujo y mejorar la calidad de vida de quienes padecen esta afección.