La verdad sobre aterrador muñeco de ventrílocuo en México

Escalofriante. Así es un video que se ha vuelto tendencia en YouTube y que revela la verdad sobre un terrorífico muñeco de ventrílocuo que fue hallado en un río de México. 

 

Según la web larepublica.pe, las personas que descubrieron a este maniquí creyeron que era ‘diabólico’ o que estaba ‘maldito’, ya que quisieron quemarlo y no podían. Pero como era de esperarse, en redes sociales se viralizó una explicación lógica y miles se sorprendieron.

 

 

Al comienzo se aseguraba que el terrorífico muñeco de ventrílocuo había sido encontrado en Río Bravo, pero lo cierto es que el horrendo maniquí fue hallado por un grupo de personas en San Antonio La Esperanza, un pequeño pueblo ubicado en el estado de Morelos, en México.

 

Estos pobladores pensaron que se trataba de un cadáver, ya que estaba envuelto en una especie de sábana; sin embargo, terminaron descubriendo que en realidad era un muñeco de ventrílocuo muy terrorífico, no solo por su horrenda cara, sino porque sus manos parecían ser unas garras.

 

 

Algo que puso los pelos de punta a miles en YouTube, Facebook y otras redes sociales, es que los pobladores intentaron quemar al muñeco, ya que lo consideraron ‘maldito’, pero no lograban. No fue sino luego de varios intentos que finalmente comenzó a arder.

 

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El portal larepublica.pe menciona que Oxlack Investigador, un canal de YouTube dedicado a desmentir casos paranormales y videos virales de Internet, investigó el hecho y pudo encontrar a la persona que creó el controversial muñeco.

 

El youtuber visitó el taller del artista, un joven mexicano llamado Julio, quien suele crear este tipo de muñecos y esculturas. Él le mostró fotos del muñeco hallado en San Antonio La Esperanza y aseguró haberlo vendido hace más de un año.

 

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Según el artista, la figura que asustó a miles está fabricado de plastilina epóxica, un material que permite crear modelados muy complejos y que cuesta trabajo que alcance a calcinarse, lo que explica la razón por la que no podían quemarlo con facilidad.