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Estas son las razones por las que se ha reducido el tamaño del cerebro humano, según la ciencia
El gran tamaño de los cerebros de hace milenios permitía que los humanos se adapten y sobrevivan en condiciones extremas.
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Imagen referencial de la anatomía del cerebro. ( )
En un estudio publicado en la revista "Nature Communications" en 2019, científicos han descubierto que el tamaño del cerebro humano ha disminuido significativamente en los últimos 30.000 años. Esta reducción, que se estima en un 3-4% en comparación con el cerebro de los humanos primitivos, ha generado interés y debate en la comunidad científica.
¿Qué factores han contribuido a este cambio?
Según los investigadores, la reducción del tamaño del cerebro humano se debe a una combinación de factores, incluyendo:
En el pasado, lo antepasados cazaban y recolectaban alimentos, lo que requería una mayor cantidad de energía y nutrientes para mantener su cerebro grande y activo. Sin embargo, con el paso del tiempo, la humanidad comenzó a domesticar plantas y animales, lo que llevó a una dieta más rica en carbohidratos y menos en proteínas y grasas.
Lo cual se traduce en menor gasto de energía, por lo que no es necesario un gran tamaño. Tal como un motor, mientras más energía se necesite, más grande debe ser.
En el pasado, los humanos vivían en entornos más hostiles y variables, con cambios climáticos drásticos. Esto requería una mayor adaptabilidad y capacidad cognitiva para sobrevivir.
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Sin embargo, con el tiempo, el clima se volvió más estable y predecible, lo que redujo la presión selectiva sobre la inteligencia. En otras palabras, no era tan necesario tener un cerebro grande para sobrevivir en un entorno más estable.
Un estudio publicado en la revista "Journal of Anthropological Sciences" en 2018 sugiere que la tecnología ha influido en la evolución del cerebro humano, porque en el pasado los humanos necesitaban desarrollar herramientas y tecnologías para sobrevivir, lo que requería una mayor capacidad cerebral.
Sin embargo, con el desarrollo de herramientas y tecnologías más avanzadas, la necesidad de una mayor capacidad cerebral se redujo. Por ejemplo, no se necesita recordar dónde están las fuentes de agua porque existen mapas y tecnología para encontrarlas.
Aunque esta reducción puede parecer alarmante, los expertos aseguran que no necesariamente implica una disminución en la inteligencia o capacidad cognitiva humana. El cerebro humano sigue siendo uno de los órganos más complejos y sofisticados del cuerpo humano.
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