Orellana | Huaticocha abre sus puertas al turismo sensorial del café amazónico

En la comunidad de Huaticocha, perteneciente al cantón Loreto, en la provincia de Orellana, 120 agricultores locales han unido esfuerzos para crear un viaje sensorial a través de la producción del café amazónico. Enclavado en las faldas del Parque Nacional Sumaco Napo-Galeras, este recorrido permite a los visitantes experimentar cada paso del proceso, desde el despulpado y fermentado de los granos hasta el tostado y la preparación de una taza de café robusta.

El proyecto, conocido como Tour Witoca, transforma los cultivos de café en una experiencia única para los visitantes. La aventura comienza en el kilómetro 77 de la Troncal Amazónica, donde Fabio Legarda, guía local, recibe a los turistas y los conduce por un sendero rodeado de exuberante vegetación y el canto de las aves amazónicas. "Nos enfocamos en la transformación del café, desde que está en la planta hasta que se sirve en una taza de espresso", comenta Legarda, quien destaca que el producto de la comunidad ha sido galardonado con premios nacionales, incluidas varias Tazas Doradas.

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Después de la cosecha, las cerezas de café se despulpan y pasan por una fase de fermentación, que ayuda a intensificar el aroma y sabor de los granos. Posteriormente, los granos se secan, clasifican y tuestan, lo que despierta los sentidos de quienes participan en esta experiencia. Cada agricultor de Huaticocha cultiva una hectárea de café, consolidando la economía y la identidad de la comunidad a través de este proyecto.

La experiencia no estaría completa sin una cata de café, en la que los turistas pueden apreciar los matices únicos de cada grano amazónico. Andrea López, catadora de café y líder del proyecto, explica que en esta etapa se destacan el aroma envolvente, la acidez balanceada y el cuerpo robusto de la bebida. "Nos sentimos orgullosos de tener una cafetería de especialidad en medio de los cafetales, donde los visitantes pueden vivir esta experiencia única y conocer también otros puntos turísticos locales, como ríos y senderos", comenta.

Este esfuerzo de turismo comunitario no solo acerca a los turistas a la cultura del café amazónico, sino que también activa la economía local. Cada mes, aproximadamente 200 visitantes se sumergen en este viaje sensorial que, además de degustar café de calidad, apoya a las familias productoras de la comunidad.

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Así, el turismo inmersivo en Huaticocha se convierte en una invitación a saborear la esencia de la Amazonía en cada taza, celebrando las raíces y el esfuerzo de quienes trabajan para transformar el grano en una experiencia inolvidable.