Zamora Chinchipe | Pena máxima para un hombre que violó a una joven y motivó su suicidio

Raúl Arnoldo Z. O. fue sentenciado a 29 años y cuatro meses de prisión como autor directo del delito de violación, cometido contra una joven de 19 años en la parroquia El Pangui, en Zamora Chinchipe. La agresión causó que, cinco días después, la víctima se suicidara.

"Si pueden, por favor, detengan a ese maniático por mí. No dejen que nadie más sufra", escribió la joven en una carta explicando el porqué de su decisión.

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La información recabada por las autoridades expuso que Raúl Arnoldo Z. O., de 52 años, se había ganado la confianza de su víctima a través de redes sociales. Incluso le pidió que fueran novios, pero ella se negó debido a la gran diferencia de edad entre ambos.

Los hechos, según explicó el Fiscal del caso, ocurrieron el 20 de febrero de 2020. El hombre convenció a la víctima para asistir a las fiestas en el cantón Yantzaza. Durante la jornada, la llevó a bares y discotecas, donde le hizo ingerir alcohol y –sin que ella se dé cuenta– le suministró una pastilla inductora de sueño.

Ya eran las primeras horas de la madrugada del 21 de febrero. La joven sentía que perdía la conciencia y le pidió al agresor que la llevara a su casa; sin embargo, el hombre desvió el rumbo hacia una hostería.

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Aprovechando el estado de somnolencia de la víctima, la condujo a una habitación, donde la agredió sexualmente. Luego de cometido el delito, la dejó en su residencia cerca de las 05:00. Horas más tarde, la joven despertó y le contó a su prima lo que recordaba.

Los familiares de la víctima presentaron la denuncia y la Fiscal de turno ordenó la práctica de una valoración ginecológica. Sin embargo, los jueces no pudieron escuchar su testimonio. El 25 de febrero de 2020, la joven tomó la decisión de acabar con su vida, ingiriendo una sustancia química para desparasitar animales.

Antes de su suicidio, dejó una carta en la que expresó sus profundas frustraciones, derivadas de un cuadro depresivo agravado por la violación.

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La Fiscalía señaló que el procesado se negó a colaborar durante la investigación, especialmente cuando se solicitó la obtención de una muestra de ADN para cotejar los fluidos extraídos del cuerpo de la víctima.

Ante la negativa, Fiscalía intentó obtener el perfil genético del padre del acusado exhumando su cadáver, pero al recibir un aviso sobre la investigación, la tumba fue profanada y no se encontraron restos suficientes para el análisis.

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Pese a los obstáculos, el Fiscal del caso obtuvo una orden de allanamiento a la casa del acusado y se obtuvo su perfil genético de una funda de almohada que estaba en su dormitorio. Tras cotejar el resultado de los análisis con los restos de ADN de la joven, se determinó que, en efecto, el hombre fue el autor del delito.