La muerte de una niña de siete años, que apareció ahogada en una cisterna, se investiga en Latacunga

Un día después de ser reportada como desaparecida, Scarlet Pullopaxi, de siete años, apareció sin vida en la cisterna de su vivienda. El hallazgo se hizo el 27 de agosto, en la parroquia Belisario Quevedo, en el sur de Latacunga.

Los vecinos contaron que se supo de la desaparición de la menor de edad la noche del lunes 26. Un grupo ayudó en las labores de búsqueda, que incluso se habrían realizado en la casa donde vivía con sus hermanos y su papá, pero no dieron con ella.

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Al día siguiente, los familiares informaron sobre una alerta recibida en la mañana, en la que les contaron que la niña fue vista caminando con otras mujeres en el barrio Chaves Pamba. Efectivos policiales llegaron hasta la zona, pero no encontraron a la niña ni tampoco pudieron recabar información.

Las autoridades regresaron a la casa donde la niña vivía con su familia para revisarla nuevamente, y fue allí cuando la menor apareció en la cisterna.

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Las primeras hipótesis apuntan a que la niña se habría caído por cuenta propia, pero se esperan los resultados de la autopsia para determinar las causas de su muerte.

Información preliminar del equipo de criminalística señaló que el cuerpo de Scarlet tenía cerca de seis horas en el tanque cuando fue descubierto, aunque este no tenía el nivel de agua suficiente para que la niña se ahogara.

Según la versión inicial del papá, la menor salió el lunes en la noche a lavar ropa y desapareció. Pero, según la hermana mayor, la niña estaba en una fiesta en el centro parroquial de Belisario Quevedo y ahí desapareció.