Migración a Estados Unidos: la inseguridad y la búsqueda de mejores ingresos aumenta la deserción policial

La migración a otros países está en el radar de los policías ecuatorianos, al menos para los jóvenes, de entre 22 y 32 años, quienes tienen rango de policías y llegan al grado de cabos en la institución uniformada.

Tras pedir la baja, ellos buscan laborar de forma irregular en Estados Unidos y son los que más han abandonado sus puestos para trabajar de manera irregular en el extranjero.

No obstante, la mayoría se va del Ecuador en avión de manera legal, porque obtuvo su visa años antes cuando tenían el respaldo de pertenecer a la institución policial. “Estoy en EE.UU. desde el 4 de septiembre. Al otro día tenía que presentarme tras regresar de mi mes de vacaciones y no lo hice”, contó Andrés Santos, expolicía migrante.

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Algunos aprovechan sus vacaciones o los días libres para irse y nunca más volver. “Esa es una decisión personal. Existen personas que les ofrecen una oportunidad de trabajo en otro país y toman la decisión de dejar la institución. Aprovechan sus días libres y no vuelven”, dijo Pablo Guachamín, director de Asuntos Internos de la Policía Nacional.

Según datos de la Policía Nacional, existe una tendencia creciente de uniformados que desertan. En el 2018 fueron 73, 186 en 2022 y 96 en los cinco meses de este año.

Unos migran por mejorar sus ingresos, algunos por el riesgo de su trabajo al no haber garantías. “La situación del país se pone de mal en peor. Lamentablemente la institución no nos presta las garantías”, expresó el policía migrante Rogel Alcívar, radicado en Washington, la capital de EE.UU.

Al momento, él en proceso de solicitud de asilo para trabajar de manera legal. La Policía Nacional anunció un plan de capacitación y de motivación hacia sus miembros.

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