Los papeles para la prelibertad los presentó después de la primera masacre que se registró en la cárcel de Latacunga, en donde cumplía su pena.
"Estos son los favores de la justicia ecuatoriana al capo albanés Dritan Rexhepi". Así tituló la revista Plan V al entramado judicial que le permitió al capo de la mafia albanesa obtener la prelibertad, cuando cumplió 7 años en la cárcel de los 13 a los que fue sentenciado.
Después de la primera masacre en la cárcel de Latacunga, en 2021, presentó la solicitud de beneficios penitenciarios. Logró ser trasladado a la Penitenciaría del Litoral y luego a una clínica.
Rexhepi, conocido como el "rey de la fugas", consiguió una inédita resolución de un juez de Guayaquil que le permitió pasar de la cárcel a su casa, antes de conseguir la prelibertad.
De este caso el ministro del interior, Juan Zapata, responsabilizó exclusivamente al sistema judicial.
"Las decisiones que genera la justicia no está en nuestras manos; el SNAI lo que tiene que hacer es dar cumplimiento a la acción judicial".
El líder de la mafia albanesa pidió la prelibertad cuando Edmundo Moncayo era director del Servicio de Personas Privadas de Libertad, entidad encargada de emitir los informes pertinentes.
Le contactamos, pero evitó hablar del caso, dijo que los directores de las respectivas cárceles son los reponsables de emitir los informes.
El exdirector de la cárcel de Latacunga, Mario Carrillo, nos explica el sistema.
"Pero el director de una cárcel con los jurídicos lo que hace es el cumplimiento de los requisitos y pasar a una comisión del SNAI, y la entidad con la documentación la revisa".
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Rexhepi se presentó por última vez ante el juez en noviembre del 2022 y desde entonces se desconce su paradero.
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