Ecuador se acerca a las tres mil muertes violentas; los crímenes se concentran en Guayas
En el país se registran 15,48 muertes violentas por cada 100.000 habitantes, la tasa más alta hasta ahora jamás registrada
El asesinato de cuatro hombres el pasado martes, dos en Durán y dos en Flor de Bastión, en el noroeste de Guayaquil, acentúan la preocupación sobre el incremento de asesinatos en Ecuador, que alcanza una tasa de 15,48 muertes violentas por cada 100.000 habitantes, lejos de la meta del gobierno de reducirla a 10, según su Plan Nacional de Desarrollo.
Los registros de la Policía, hasta las 05:00 de este miércoles, 7 de septiembre, indican que en el país se contabilizan 2.877 muertes violentas. Y falta incluir a las recientes víctimas de crímenes ocurridos durante la madrugada. El número sigue creciendo conforme avanzan las horas.
Los números indican que 360 personas son asesinadas cada mes en promedio en Ecuador.
GUAYAS, LA MÁS VIOLENTA
La mayoría de los crímenes, según inteligencia policial, están relacionados con la lucha por territorio entre bandas por el expendio de drogas y el incremento de las muertes ocurre precisamente en los lugares donde más opera el narcotráfico.
Guayas, de largo, lleva la delantera en este indeseado ránking con 1211 muertes violentas, con corte al 1 de septiembre. La Policía, en sus cuentas, separa los crímenes ocurridos en la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón) del resto de cantones de esta provincia.
Según el reporte, en la Zona 8 ya se superó la cifra de 974 muertes violentas en 8 meses de este 2022. Y las 1211 vidas perdidas en Guayas en este tiempo ya supera el total de asesinatos que hubo en todo Ecuador en 2019.
En abril pasado, el ministro del Interior, Patricio Carrillo, reconoció que en el primer cuatrimestre de este año el país alcanzó el mismo número de muertes violentas que en todo 2020: cerca de 1.180.
Y admitió que de seguir la tendencia al alza, el país terminaría con cerca de 4.000 muertes violentas al cierre de este año, con tasas similares a países de Centroamérica.
Es septiembre y, en efecto, el país ya está cerca de contar tres mil muertes a causa de la ola de la violencia originada principalmente en el narcotráfico, con foco en las cárceles.
Ahora Carrillo ha lanzado la idea de un modelo administrativo carcelario mixto, donde intervengan los municipios y hasta centros militarizados para sofocar la violencia interna, pero sobre todo, para anticiparse y anular acciones delincuenciales que desde los centros de privación de libertad se ordena realizar en las calles de las ciudades más violentas como Guayaquil, por cuyos puertos se exporta el 70% de la droga que se almacena o se procesa en el país, según inteligencia.
ESMERALDAS, AUMENTO EXPONENCIAL
Después de las 1211 muertes violentas en todo Guayas, la provincia que le sigue es Esmeraldas, con 322; pero estar mucho más abajo en comparación con la primera no es motivo de relajación, ya que esta zona tiene un incremento exponencial de asesinatos en comparación con el año pasado.
En todo el 2021, hubo 83 asesinatos en la provincia fronteriza con Colombia, ahora casi cuatro veces más y eso hace que la tasa de homicidios aquí se haya disparado a 48,79 por cada 100.000 habitantes.
En Esmeraldas ocurre algo parecido que en Guayaquil, desde las cárceles se ordenan asesinatos ligados al mercado ilícito de drogas. Ambas ciudades están intervenidas por una ‘Fuerza de Tarea Conjunta’ conformada por policías y militares, pero los crímenes no paran, sino que van en aumento.
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Su ubicación geográfica, ser vecina del primer productor de cocaína del mundo, Colombia, y el abandono del Estado por años, con el consecuente índice pobreza y deserción escolar, hacen de Esmeraldas el caldo de cultivo de las organizaciones narcodelictivas que se disputan el liderazgo allí.
Pero el gobierno de Guillermo Lasso defiende su gestión en poco más de un año y resalta, según el Ministerio del Interior, que en lo que va del 2022, la Policía ha incautado 112 toneladas de droga en todo el país y se acerca a las 210 toneladas incautadas el año pasado, una cifra récord.
Carrillo cree que las acciones para neutralizar al narcotráfico provocan estas reacciones, las muertes violentas que se dan por un mercado que está siendo sitiado por la Policía, según él.
MANABÍ, EN LA RUTA DEL NARCOTRÁFICO
De las 112 toneladas de droga incautadas en lo que va del año, 43 de ellas se han detectado en las cinco terminales portuarias que operan en Guayaquil, situado en el río Guayas, desde donde se moviliza más del 85 % de la carga de exportación no petrolera de Ecuador.
El resto sale por diferentes puertos artesanales de la provincia de Manabí, situada en la ruta del narcotráfico hacia Centroamérica para llegar a México y Estados Unidos.
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Aquí es menos frecuente el uso de los puertos para exportar droga camuflada en contenedores, como sucede en Guayaquil, aunque hace pocas semanas la policía descubrió una fábrica donde se metía droga en latas en lugar de atunes.
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Ligado al narcotráfico, los sicariatos en Manabí ocurren a diario. Si en todo el 2021 murieron 144 personas, cifra que ya era alta, en ocho meses de este año se duplicó y ya van 294 muertes violentas.
Eso ubica a Manabí con una tasa de 18,24 asesinatos por cada 100.000 habitantes, un dato no menor si se toma en cuenta que es la tercera provincia con más crímenes, detrás de Esmeraldas (322) y Guayas (1211).
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