Las tradicionales caretas para fin de año se elaboran desde la segunda semana de enero en talleres de Quito
Aquí la creatividad no tiene límites y los artesanos dejan volar el ingenio. Pero, ¿cómo se elaboran?
Durante dos décadas las manos de los tres hermanos Almeida se han dedicado a diseñar, formar y pintar caretas de todas las formas y colores posibles. Ponerle rostro a los años viejos demanda tiempo y se lo tiene que hacer con un año de anticipación.
Las caretas más pequeñas son las primeras el elaborarse; en febrero ya tienen la primera producción.
Revise: Quito tendrá un Festival de Años Viejos en la avenida Amazonas; revise los cierres viales
Aquí la creatividad no tiene límites y los artesanos dejan volar el ingenio. Pero, ¿cómo se elaboran?
Un proceso que toma casi 12 meses
Primero se tiene que trabajar en el molde, que se considera lo más difícil, porque hay tener que poner las características de cada personaje.
Javier Almeida, de El arte del oso, cuenta que se trata de una tradición que tratan de mantener viva. "Antes uno mismo buscaba la ropa para rellenarle al viejo, comprar una careta de cartón", recuerda.
Le puede interesar: Quito | Cierres viales y dos paradas sin atención por trabajos de hormigonado en carril de la Ecovía
Luego se elabora el engrudo que es hecho a base de goma con papel, esto sirve para formar el rostro, para que luego sea pintada con las tonalidades de los diseños. En un día elaboran 120 caretas.
La gran demanda les obliga a que comiencen con la elaboración desde la segunda semana de enero, para poder distribuirlas en varias provincias.
Los diseños dependerán de los acontecimientos nacionales, estrenos de películas y personajes relevantes que marquen tendencia en las redes y en los medios de comunicación.
Recomendadas