Pachakutik cierra filas ante el correísmo y se contradice sobre la destitución de Guillermo Lasso

La bancada de Pachakutik en la Asamblea –sin contar a seis de sus miembros autodenominados 'rebeldes'– no se ponde de acuerdo sobre el objetivo del correísmo de destituir al presidente Guillermo Lasso.

Primero dijeron que no darán sus votos en la sesión virtual que fue convocada para las 18:00 de este sábado, pero este mediodía dijeron que sí. Pero solo fue un comunicado en redes. Al final, no hay un consenso claro de sus integrantes.

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Salvador Quishpe, coordinador de Pachakutik en la Asamblea, dijo en un comunicado de esa organización que no permitirán "que el correísmo se aproveche de la movilización y se tome el poder".

Sobre el anuncio de los 47 correístas de poner sus cargos a disposición para avanzar hacia el mecanismo de la muerte cruzada, Quishpe señaló: "si van a renunciar, que renuncien por escrito y no solo hagan un show mediático".

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Esos 47 votos más los seis de los 'rebeldes' que no siguen la línea del movimiento plurinacional sumarían 53 voluntades, insuficientes para lograr el mínimo requerido de 92 votos para activar en la Asamblea un proceso de destitución del Presidente de la República.

Sumarían unos más con el cambio de criterio de Pachakutik, que este sábado dijo que como no hay diálogo del Gobierno con la Conaie, entonces votarán por lo que propuso el correísmo, pero aún así no llegarían a completar los 92 votos necesarios.

Ellos son 24, contando los seis rebeldes, y a pesar del último comunicado, no todos votarán igual.

En concordancia con Quishpe, Ricardo Vanegas, legislador del mismo movimiento, conminó a los de UNES, donde se agrupa el correísmo, a que dejen las amenazas y que pasen de las redes sociales a renunciar en realidad, si así lo quieren.

"¡Diciendo y haciendo Señores! No pongan a disposición el cargo, acérquense a la Secretaría de la Asamblea y renuncien", les pidió a los parlamentarios que hoy deben dar sus argumentos para la destitución de Lasso y esperear que alguien más se sume.

Vanegas continuó: "Es más, les facilito el trámite. Adjunto el modelo para que procedan formalmente, y no como lo han hecho hasta ahora, por Twitter. Vayan, renuncien. Y no sigan con sus intentos de desestabilizar al Ecuador. ¡La democracia se respeta!".

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El correísmo activó el trámite de destitución el viernes, unos días después de que habían negado esa intensión y asegurado que era "falso" un documento borrador que se filtró en redes sociales donde se leía la propuesta que terminó siendo real. O que siempre fue real, según el independiente Fernando Villavicencio.

Otro integrante de Pachakutik, Marlon Santi, quien también es parte de la Conaie, dijo que respalda la agenda de los 10 puntos que los indígenas plantearon al Gobierno, pero pidió a sus compañeros que están en los frentes de lucha que “regresen a los lugares de paz, no expongan la vida”.

Oscar Cadena, de la Fenocin, un grupo minúsculo que aún permanece en Quito, rechazó lo que dijo Marlon Santi y lo desconoció como vocero de la Conaie.

Esto ante los actos vandálicos que la Policía y Fuerzas Armadas contrarrestarán con mayor uso progresivo de la fuerza, según lo anunció Lasso el viernes.

Esos actos, según el presidente de la Conaie, Leonidas Iza, han sido provocados por "infiltrados", mientras que Lasso señaló que el dirigente indígena ya no tiene el control sobre aquellos que están causando actos terroristas.

Y en ese sentido, Marlon Santi hizo un pedido: “Señor Correa: retire a su gente de nuestras filas”.

El presidente de la Conaie, por su parte, también dejó solo al correísmo, aunque no en la parte política, sí en el ámbito social, porque según Iza ellos tampoco se adhieren la idea de que Lasso salga del poder Ejecutivo, sino que lo use para cumplir lo que ellos piden, como la rebaja y congelación del precio de los combustibles, entre una lista de 10 exigencias para poner fin al paro.