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Los aspirantes deberán someterse a una prueba sicológica y a otra de confianza, además del proceso de méritos y oposición.
Más de 700 personas asistieron a la capacitación para postularse al concurso de Jueces Anticorrupción, por lo que se espera que hasta el próximo 11 de abril, cuando se cierra el proceso en línea, la participación sea masiva.
Las 14 vacantes se llenarán con los mejor puntuados en las etapas de méritos y oposición, pero además, los aspirantes se someterán a dos pruebas que no tienen calificación, pero pueden ser determinantes.
La primera es la evaluación sicológica. El vocal del Consejo de la Judicatura, Juan José Morillo explica cómo se realizará.
"Quien no supere la evaluación psicológica será excluído del proceso de evaluación".
La segunda es la prueba de confianza que se aplicará durante el curso de formación inicial que se impartirá en la Escuela de la Función Judicial a quienes hayan obtenido una calificación de mínimo 80 puntos sobre 100.
Esta prueba se está elaborando con la asistencia del programa contra el Crimen Transnacional Organizado de la Unión Europea, aún no se conoce en qué consistirá y si los concursantes serán sometidos al polígrafo.
Los jueces seleccionados trabajarán en la nueva Unidad Judicial Especializada en Delitos de Corrupción y Crimen Organizado que funcionará desde Quito.
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