Juicio político a vocales de la Judicatura es "un pretexto" del correísmo para tomarse otra vez la justicia, asegura Murillo

El presidente del Consejo de la Judicatura, Fausto Murillo, considera que el juicio político que contra él y dos vocales más del organismo siguen legisladores del correísmo, el Partido Social Cristiano y disidentes de otras facciones políticas “es un pretexto para tomarse la administración de justicia”.

Así lo dijo en un acalorado debate en el programa Políticamente Correcto de Ecuavisa, este domingo, 21 de agosto, en el que se analizó el sistema de justicia a pocos días de que la Asamblea culmine el juicio político contra tres integrantes.

Según Murillo, no hay bases en la Asamblea para seguir un proceso en su contra y los demás miembros del Consejo. Lo que se pretende, según su criterio, es “nombrar conjueces temporales que tengan la posibilidad de revisar los casos de corrupción que tienen sentencias ejecutadas y ejecutoriadas”.

Y recordó que en 2019, debido a la situación en la que se encontraba el sistema de justicia, el Consejo de Participación Ciudadana Transitorio exhortó a la Judicatura a que evalúe a la Corte Nacional. “Actuamos con potestad y bajo estrictos parámetros metodológicos”.

El jurista y catedrático Pablo Encalada, otro invitado al programa, consideró que debe proceder el juicio político porque “se debe inaugurar el estado de derecho” y cree “que los vocales deben asumir las consecuencias de sus acciones”.

Para él, una sentencia de la Corte Constitucional estableció que la evaluación fue inconstitucional “porque significó la última metida de mano en la justicia”.

El fallo de la Corte Constitucional señala que en la evaluación de 2019 no se violó la independencia judicial ni los derechos de los evaluados, replicó Murillo. “Los informes técnicos determinaron que quienes fueron removidos no calificaban para ser parte de la más alta Corte del país”.

Según Murillo, bajo su administración no se ha puesto a un solo juez en el cargo. “El 99,9% de los jueces que hoy están en funciones fueron nombrados por el correísmo, si alguno sale, hay que elegir otro del banco de elegibles que el correísmo dejó”.

El asambleísta Fernando Villavicencio no está de acuerdo en destituir a los vocales de la Judicatura por haber evaluado a los jueces, él cree que hay una trama política de fondo para tomarse la justicia, y apuntó directamente al correísmo y al PSC.

El legislador de este partido, Luis Almeida, rechazó esa acusación y dijo que hay que dejar atrás “los cucos” de que toda fiscalización es promovida para hacerle juego al correísmo, que sí intervino en la justicia cuando ejercía Rafael Correa como presidente.

Según Almeida, “por orden de Murillo y Aparicio Caicedo (asesor presidencial) una jueza quiere restituir a Guadalupe Llori en la presidencia de la Asamblea, y así detener el juicio político (contra los vocales de la Judicatura).

Villavicencio aseguró que la agenda del correísmo en la Asamblea, con la ayuda del PSC, es llenar el país de juicios políticos, hasta llegar al proceso “nodriza”, el del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, que es el nominador de las autoridades públicas.