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Debate Presidencial: Luisa González usó una nueva estrategia para llamar la atención del electorado
La candidata del correísmo buscó mostrarse más intelectual, serena y evitar el confortamiento.
Luisa González se enfocó en una nueva estrategia para el debate presidencial de este domingo,1 de octubre. Dejó de lado la frase “Ya lo hicimos y lo volveremos a hacer”, dirigida para sus seguidores, y buscó mostrarse más serena, sin confrontar a candidato Daniel Noboa.
La candidata evitaba nombrar a Rafael Correa, sin importar las indirectas que su contrincante, como sucedió cuando mencionaron la tabla de consumo y ella salió a defenderla.
Lo señalado como directriz para Luisa González era no evocar al expresidente, porque buscaba demostrar que, en caso de ganar, ella tendrá el poder. Incluso, remarcó en dos ocasiones que ella es la candidata y será ella quien gobierne al Ecuador, para contrarrestar la imagen de servil que había creado
También decidió tomar distancia a los hechos ocurridos durante la década correísta, en la que ella fue funcionaria del ejecutivo, legisladora y hasta diplomática. No reaccionó cuando Noboa insinuó actos de corrupción en la reconstrucción de Manabí y Esmeraldas, en la red de Salud Pública, en las refinerías y en el uso de avión presidencial, caso que ella estuvo involucrada.
No obstante, González no se quedó callada y respondió enviando a la audiencia a googlear quién es el ex ministro de Agricultura, Bernardo Manzano. Buscando seguir en la línea de no confrontación y sin atacar a Daniel Noboa.
Pero no desaprovechó las contrarréplicas para sacar a relucir su ironía, apostando por la lucha de clases, con comentarios como que ella sí se atiende en hospitales públicos y por ello conoce las realidades de los votantes.
Además, procuro evadir temas como la soberanía de los pueblos, infaltable en la narrativa correísta, y las coincidencias con Venezuela, Cuba y Nicaragua.
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En comparación con el primer debate, se podía ver una Luisa González más serena, metódica y pedagógica. Enseñaba un look ejecutivo, con grandes lentes que retiraba y ponía en su rostro, intentando demostrar que sabe y que está preparada. Quiso demostrar que conocía de las cifras, aunque muchas eran imprecisas, nadie iba a refutarlas.
Quiso demostrar que conocía de las cifras, aunque muchas eran imprecisas, nadie iba a refutarlas.
Además, dejó de lado la imagen más alegre que ha proyectado en redes sociales, desde donde busca captar el voto joven. Finalizó su debate dirigiéndose a las mujeres, buscando nuevos electores.
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