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Los hechos alrededor de la disputa entre Daniel Noboa y Aquiles Álvarez
Una nueva controversia entre el Gobierno y el Municipio de Guayaquil se desata con la auditoria del Ministerio de Ambiente al cabildo que lidera Aquiles Álvarez, señalando que las aguas residuales contienen coliformes fecales, por encima de la norma.
Un nuevo capítulo se forja en la disputa abierta que existe entre el Gobierno del presidente Daniel Noboa y el alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez.
Los desencuentros empezaron en octubre del 2023, Noboa era finalista en la contienda electoral y Álvarez, anfitrión de las fiestas el 9 de Octubre de ese año, durante la sesión solemne que se desarrollaba en el Malecón Simón Bolívar una caravana de simpatizantes de Noboa pasó el lugar. Álvarez reclamó por lo que llamó un irrespeto a la ciudad y por la inasistencia del entonces candidato a la invitación que se le había realizado.
Apenas posesionado, Noboa como Presidente de la República, uno de sus primeros decretos, el vigésimo noveno, tuvo como objeto retirar al Municipio de Guayaquil la delegación para la construcción del viaducto sur de la ciudad, el llamado Quinto Puente, y claro, hubo reclamos.
Reclamos que subieron de tono porque, según el alcalde Álvarez, el Gobierno retrasaba injustificadamente la entrega de un aval que permitiría la llegada de un crédito de la Corporación Andina de Fomento que financiaría la dotación de agua potable para Monte Sinaí.
El aval finalmente se entregó pero Noboa aseguró que fiscalizaría la obra. Álvarez le sugirió que mejor fiscalice a sus ministros.
Pocos días después el Gobierno denunció a Álvarez, sus hermanos y su empresa Copedesa por comercialización irregular de combustibles.
A estas alturas ya era feroz la pelea y en las fiestas de julio cada quien tuvo su sesión solemne. Pero allí no terminó la cosa, asambleístas del oficialismo denunciaron a Álvarez por violencia política de género y a la empresa encargada de la recolección de basura en Guayaquil.
El presidente Noboa se adhirió a la denuncia y dijo en redes sociales que se están mezclando los desechos sólidos con lodo para que tengan más peso y así cobrarle a la ciudad más por un servicio que se paga por tonelaje.
El más reciente de los episodios de este conflicto tiene relación con los controles que realizó la Agencia de Regulación y Control del Agua de la calidad del agua residual que proviene de dos plantas de tratamiento y que se deposita en el río Daule.
Según la agencia los niveles de coliformes fecales, entre otras sustancias, exceden los límites máximos que permite la norma. El ministerio de Ambiente señala que se trata de una infracción muy grave y por ello inició un procedimiento sancionatorio contra el Municipio, la Empresa de Agua Potable y Alcantarillado y la concesionaria Interagua.
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A esto se suma que la ministra de Ambiente, Inés manzano, indicó que se inició una auditoría al Municipio por su gestión ambiental. Uno de los aspectos que se analiza son las licencias emitidas para la explotación de canteras en la Vía a la Costa.
Según el alcalde Álvarez todo se trata de una persecución política, el Gobierno señala que es indignación ante lo que llaman un Municipio indolente.
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