Aunque los contratos con Claro y Movistar no se han cerrado, los servicios no se suspenderán, asegura el Gobierno

Las negociaciones entre el Estado ecuatoriano y las empresas Claro y Movistar, que concentran casi el 83 % de los usuarios de telefonía celular del país, están detenidas. Según la ministra de Telecomunicaciones, Vianna Maino, a pesar de esta paralización, "por ningún motivo nos quedaremos sin servicio".

A inicios de junio la funcionaria aseguraba que la negociaciones habían avanzado en un 80 %, sin embargo, ahora sostiene que aún faltan aspectos económicos y técnicos por definir, como la implementación de la tecnología 5G y la responsabilidad social de las compañías.

Los próximos contratos regirán por 15 años.

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El acuerdo actual con el Consorcio Ecuatoriano de Telecomunicaciones S.A. (Conecel), nombre jurídico de Claro, vence en agosto. Mientras que, con Otecel S.A., nombre jurídico de Teléfónica Ecuador, que agrupa a las operadoras Movistar y Tuenti, termina en noviembre.

Con el objetivo de que el servicio no se altere mientras no se cierren las negociaciones, el Gobierno Nacional ha prorrogado los contratos vigentes.

"Se van a prorrogar para mayor tranquilidad de la ciudadanía y de las empresas", dijo la ministra este miércoles 12 de julio en entrevista con Teleamazonas.

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Maino espera que los acuerdos queden cerrados antes que termine el Gobierno de Guillermo Lasso, en noviembre de 2023.

Explicó que las negociaciones entre el Ejecutivo y las operadoras se extendieron por seis meses, desde diciembre de 2022 hasta junio pasado, no obstante, resaltó que desde 2021 se venía preparando la documentación y evaluando los cumplimientos de Claro y Movistar en Ecuador.

Los contratos de concesión de Conecel y Otecel fueron renovados en 2008. Pagaron en conjunto 308 millones de dólares por operar en el país, pero en 2018 cancelaron otros USD 330 millones por acceder al espectro que les permitió instalar la red 4G.

Los convenios contemplan que, adicionalmente, las compañías contribuyan con el 3,93 % de su facturación anual, que en 2022 fue, entre las dos operadoras, de 1.500 millones de dólares.

En el país hay un tercer actor en el negocio de las telecomunicaciones: CNT, que tiene un 17 % de participación en el mercado.

En total, en Ecuador hay 17,6 millones de líneas activas, sin embargo, solo 10,5 millones de ellas cuentan con tecnología 4G. Y es que la cobertura de esta señal, a diciembre de 2022, alcanzaba solo el 78 % del territorio nacional y no siempre con una calidad acorde a los estándares requeridos.