A Luis Almeida no le alcanza el sueldo de asambleísta: "en una semana se me acaba y tengo que correr a pedirle a mi esposa"

En el marco del juicio político al presidente Guillermo Lasso, algunos asambleístas emitieron comentarios que llamaron mucho la atención, como la interpelante correísta Viviana Veloz que dijo que el Mandatario "probablemente envió a silenciar" a Rubén Cherres, un eufemismo para referirse al asesinato del hombre que era investigado por la Fiscalía en una presunta trama de corrupción.

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Si la acusación de asesinato de Veloz a Lasso resultó hilarante, no fue menos sorprendente el discurso del asambleísta Luis Almeida, del Partido Social Cristiano, quien fue el cuarto legislador en tomar la palabra en el debate de réplica al presidente Lasso.

Almeida dijo que le "duele la Patria y la pobreza de la gente" porque a nadie le alcanza el dinero por tanto impuesto que hay.

Y entre esos a los que no les alcanza el dinero se puso él mismo. "La gente no está conforme porque los impuestos los matan, ¿cuanto gana un legislador? 4.500 dólares" dijo Almeida, aunque en realidad cada asambleísta le cuesta al país 4.759 dólares al mes.

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Pero Almeida se quejó de que cobra menos porque le retienen impuestos. "Yo recibo 3.330 dólares y en la primera semana se me acaba... y tengo que correr a pedirle a mi esposa, a la herencia de mi madre, para poder suplir los pasajes de avión de la gente que me acompaña, que son grandes asesores que tengo...".

Al igual que los asambleístas, sus asesores también ganan sueldos y viáticos por transporte, hospedaje y alimentación, pero Almeida no lo mencionó en su discurso sobre la pobreza.

En Ecuador, un asambleísta puede tener dos asesores y dos asistentes administrativos costeados por el Estado.

Los asesores nivel 1 ganan 3.014 dólares y los de nivel 2 cobran 2.545 dólares cada mes. Los asistentes administrativos perciben un salario de 1.394 dólares mensuales.

Pero Almeida quiso contrastar que si la carga tributaria les pesa a los asambleístas, el escenario es peor "para la gente no gana el salario mínimo vital (que es de 450 dólares y por los cuales no se paga impuestos). "¡Para ellos debemos legislar!"

Almeida dijo que más allá de que hayan o no los votos para cesar al presidente Lasso, "la gente quiere cambios ahora".

Por eso aseguró que cuando llegue el día de la votación sobre la destitución o no del Presidente, él será consecuente con la gente que lo eligió, citando a los habitantes de los guasmos, "la gente más pobre de Guayaquil".

Antes de decir que su sueldo de casi 5 mil dólares mensuales no le alcanza para más que una semana, Almeida cuestionó que en el proyecto de la reforma tributaria que el Ejecutivo envió la semana pasada a la Asamblea "se creen impuestos para espectáculos públicos, porque a nuestra gente le gusta el guitarreo".

Según él, habrá un efecto negativo para actividades y negocios adyacentes a los eventos culturales.

También se quejó del impuesto del 15% con el que, que según él, se gravará a los eventos deportivos, lo cual no existe en la propuesta normativa, sino a las casas de pronósticos deportivos y a sus usuarios.

Almeida sostuvo que por ese impuesto la gente "tendrá que pagar más cuando venga un equipo extranjero al Ecuador", aunque nada de eso consta en el proyecto de reforma tributaria, pues el Gobierno no pretende gravar los eventos deportivos, sino las apuestas.