La Navidad en Guayaquil: del caos a una celebración más amplia, pero austera

350 000 dólares es el presupuesto que ha destinado este 2024 el Municipio de Guayaquil para realizar festejos a propósito de la Navidad y fin de año. Según Tahiz Pánus, directora de Turismo y Eventos Especiales de la Alcaldía, se asignaron 100 000 dólares menos para las celebraciones decembrinas, en comparación con 2023.

Si bien la disposición del alcalde Aquiles Álvarez en su año y medio de administración ha sido reducir costos y evitar excesos en grandes festejos, Pánus sostiene que las fiestas y eventos no han cesado y que muchos de ellos se han logrado con financiamiento de la empresa privada.

Lea también: El Concejo Cantonal de Guayaquil aprueba presupuesto de 2025 por USD 863 millones

Detalla que este año se han realizado 26 eventos masivos a propósito de la época navideña y que los agasajos no se han concentrado en el centro de Guayaquil. Por ejemplo, el 20 de diciembre hubo un evento en la avenida Casuarina, en el noroeste de la ciudad, que incluyó un Papá Noel trepado en un trineo que descendía mediante una grúa.

El 5 de diciembre, en cambio, fue encendido el árbol de Navidad más grande de la urbe, que tiene 26 metros de altura. La estructura fue instalada en el Parque Samanes (norte).

También se han realizado agasajos en Monte Sinaí, Sergio Toral, Flor de Bastión, Bastión Popular, Casas Colectivas (Gómez Rendón entre José Mascote y Avenida del Ejército), Palacio de Cristal, la Terminal Terrestre Jaime Roldós Aguilera, Puerto Santa Ana, entre otros lugares.

Este 2024 no existirán los conciertos masivos por fin de año a lo largo de la avenida Malecón, como ocurría durante las administraciones de Cynthia Viteri o Jaime Nebot. Y el espectáculo de juegos pirotécnicos, también tradicional en años anteriores, estará a cargo de la empresa privada.

En las alcaldías de Nebot y Viteri, quien estaba a la cabeza de las celebraciones en la ciudad era Gloria Gallardo. Los desfiles, conciertos y agasajos navideños eran muy esperados y concurridos. La desaparecida Empresa Pública de Turismo, Promoción Cívica y Relaciones Internacionales, entonces dirigida por Gallardo, preparaba shows de juegos pirotécnicos, exposiciones y actividades que promovían el ambiente navideño.

La misma Gallardo desfilaba por la avenida 9 de Octubre ataviada en largos vestidos con luces, convirtiéndose en un personaje vistoso para los asistentes.

Todos estos festejos demandaban más recursos económicos, enfatiza Pánus.

Otra actividad que era característica de la época decembrina en Guayaquil era la teletón, una transmisión televisiva ininterrumpida que reunía a decenas de artistas y buscaba recaudar dinero para obras sociales. Este evento fue promovido por las administraciones socialcristianas y contaba con el apoyo de grandes compañías. La última vez que se realizó una teletón fue en diciembre de 2022. A través de esa transmisión se logró recaudar más de 1,8 millones de dólares.

Revise además: Con los eventos por Carnaval, Gloria Gallardo se despide de la promoción turística de Guayaquil

En la memoria de muchos guayaquileños queda aquel episodio trágico a propósito de la Navidad de 1989. La entonces alcaldesa Elsa Bucaram convocó a miles de ciudadanos a los exteriores del Palacio Municipal para realizar una entrega de juguetes. Entre los obsequios sobresalía una pelota amarilla con las palabras: Abdalá, Elsa y PRE.

Una marea de gente copó cuatro cuadras alrededor del edificio municipal, según reportó el equipo informativo de Ecuavisa de la época.

La administración municipal instaló un tobogán alrededor de uno de los balcones del edificio desde donde se deslizaban las fundas con los obsequios. También, desde el balcón, se lanzaba las bolsas hacia los asistentes.

La desorganización del evento y las faltas de seguridades por parte del equipo de Bucaram provocó tal caos que dejó un saldo fatal de al menos cuatro fallecidos y decenas de heridos y asfixiados.

Le puede interesar: La perspectiva de la expresidenta Rosalía Arteaga sobre Bucaram, Abad y el nuevo Gobierno

Como en todo el mundo, diciembre es aprovechado para promover el ambiente festivo, el turismo, el comercio y también objetivos políticos. Las administraciones municipales de Guayaquil no han sido la excepción, aunque hubo errores como el de 1989 que no pueden volver a repetirse.

Actualmente, la administración de Aquiles Álvarez fomenta el ambiente festivo, pero con austeridad. Para cerrar el año, aún está pendiente la promoción más entusiasta de la Ruta de los Gigantes, la tradicional exposición de monigotes (años viejos) en el Suburbio de la urbe. Según Tahiz Pánus, "en Guayaquil van a haber grandes fiestas".