Tuberculosis y sarna, problemas persistentes en la Penitenciaría del Litoral, según organización

El Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos (CDH) ha registrado 177 denuncias este año por la falta de atención médica a personas privadas de libertad. Las enfermedades más comunes reportadas son la sarna y la tuberculosis, las cuales, según la organización, se agravan debido a la falta de tratamientos adecuados y continuos.

Muchos de los reos que padecen estas enfermedades no reciben el tratamiento necesario de forma permanente. Un ejemplo alarmante es el de un recluso con tuberculosis del pabellón 3 de la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, cuyo cuadro empeoró y debió ser trasladado a un centro de salud.

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Abraham Aguirre, abogado del Comité, confirmó que en dos cárceles de Guayas, donde están recluidos aproximadamente 12 000 presos, los casos de tuberculosis y sarna son recurrentes. Aguirre aseguró que la atención médica en la Penitenciaría del Litoral es precaria, lo que se evidencia en imágenes obtenidas recientemente que muestran las condiciones de los internos.

El abogado también advirtió que la falta de continuidad en los tratamientos provoca que los pacientes desarrollen resistencia a los medicamentos, lo que los deja sin opciones de una cura efectiva. Esta situación complica la erradicación de la tuberculosis, que requiere de un control constante y adecuado.

Según el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad (SNAI), hasta mediados de agosto se reportaron 627 casos de tuberculosis en las cárceles del país. El SNAI continúa actualizando los datos a través de tamizajes realizados junto al Ministerio de Salud Pública (MSP) en las 35 prisiones de Ecuador.