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Solo una parte de la Hidroeléctrica Toachi Pilatón funciona tras 14 años de construcción
El complejo Hidroeléctrico Toachi Pilatón debía ser el quinto más grande del país y entregar más de 250 megavatios de energía.
14 años después de que inició la construcción del Complejo Hidroeléctrico Toachi Pilatón, con una inversión de más de 1 000 millones de dólares, el país recibe un porcentaje de la electricidad que ahí se debería producir.
Proviene de estos tres generadores que funcionan desde marzo. Son de la Central Sarapullo que es la primera etapa del proyecto generador Toachi Pilatón. Cada equipo puede producir algo más de 16 megavatios y en total la Central genera 49 megavatios cuando las tres turbinas están al 100% de su capacidad.
Pero eso depende del comportamiento del río Pilatón, que es el que provee el caudal para alimentar el complejo. El río se represa en esta captación de mediano tamaño.
Para que la Central funcione a toda su capacidad requiere de cerca de 40 metros cúbicos de agua por segundo que se desvían por cuatro canales que desembocan en un túnel que llega a la casa de máquinas para poner a rotar cada generador.
Así lo explica Jose Luis Molina, operador Central Sarapullo
"Dependiendo de eso, justamente nosotros entramos con una, dos o tres unidades de generación que nosotros tenemos acá; conforme a los caudales van subiendo en río Pilatón nosotros vamos incrementando la potencia en nuestras unidades".
Poner a funcionar, Sarapullo requirió de trabajos que se hicieron los últimos dos años. Se repararon de emergencia fallas detectadas y se debió instalar nuevos equipos electromecánicos.
El trabajo concluyó a mediados del año pasado y tras las pruebas y ajustes, Sarapullo estuvo en condiciones de entregar energía desde marzo de este año al sistema nacional.
La obra estuvo abandonada casi una década. Las fallas en la construcción y en la provisión de los equipos obligaron a suspender la obra e iniciaron las disputas entre el Estado y el consorcio CWE, que acabaron en demandas y terminaciones unilaterales de los contratos.
Así lo indicó, Hermel Flores, Gerente complejo Toachi Pilatón.
"Lamentablemente, los acontecimientos, especialmente de orden judicial ocurridos con los contratistas a su tiempo, pues impidió que la construcción marche de manera armónica, eso hizo que un desfase de varios años no haya podido entrar esta central a operar".
Solo en 2019 el gobierno firmó un contrato con la rusa Tyazhmash que proveyó los equipos faltantes y las reparaciones urgentes y se pudo poner a funcionar la central inicial del complejo Toachi Pilatón que es clave para la generación eléctrica del Ecuador porque se encuentra en la Cordillera Occidental.
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Por eso es complementaria a las centrales hidroeléctricas del Oriente, ya que está planificado para que llegue a su pico de generación en los meses en los que, en cambio, las del Oriente están produciendo menos energía.
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