La ministra de Gobierno, María Paula Romo, confirmó que se intensificarán los controles.
El anuncio de una facción de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) sobre el retorno a la lucha armada genera preocupación entre los pobladores de la frontera norte.
Habitantes tanto de Mataje, en Esmeraldas; como de General Farfán, en Sucumbíos temen por que exista un posible incremento de la violencia en sus zonas.
En la primera localidad, grupos narcodelictivos han operado desde hace tiempo. Mientras que, en la parroquia amazónica antes mencionada se encuentra el puente del río San Miguel, una vía de conexión entre Ecuador y Colombia.
Ante este escenario de conflicto y amenaza a la seguridad del Estado, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional reforzarán las operaciones de vigilancia, cada una dentro de sus competencias.
La ministra de Gobierno, María Paula Romo, confirmó que se intensificarán los controles.
Por su parte, el ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín, señaló a Ecuavisa que los militares fortalecerán operaciones de inteligencia y entrenamiento.
También se analiza un incremento de personal en la frontera. Actualmente se encuentran desplazados 6.000 soldados a lo largo de los 720 kilómetros del límite común con Colombia.
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