Metro de Quito: así funcionará el sistema de recaudación

El funcionamiento del sistema de recaudación del Metro de Quito es uno de los temas que más llama la atención de los usuarios previo al inicio de las operaciones que será en diciembre del 2022.

La ordenanza número 017 señala que la tarifa de ese servicio es de USD 0,45 para los traslados sencillos, mientras que USD 0,60 tendrán que pagar quienes utilicen los alimentadores en viajes integrados.

El sistema informático y una parte de los equipos de control de acceso ya fueron instalados por la Empresa Pública Metropolitana Metro de Quito (Epmmq). Son los aparatos que hacen control de acceso y se los llama pasillos, que son puertas de vidrio batientes que regulan la circulación de personas hacia el andén.

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También hay sistemas de validación que permiten verificar el medio electrónico con el que se paga el traslado. Están por llegar al país los puntos de venta que son las máquinas que van instaladas en taquilla con las que el operador comercializará los viajes.

Adicionalmente se contará con unas máquinas automáticas denominadas ATM (Automatic Teller Machine) que sirven para expender las tarjetas de viaje y las recargas. Al momento se trabaja en la validación de tarjetas con los bancos, cooperativas y establecimientos comerciales para que la gente pueda adquirirlas.

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Está previsto que el sistema además aborde otros métodos de pagos abiertos. Eso significa que, a futuro, se utilizarán modalidades directas a través del teléfono celular o tarjetas similares a las de débito o crédito.

Quienes que adquieran viajes recibirán un código QR impreso. Con este, el usuario se acercará al validador y certificará el traslado. No podrá ser usado más de una vez ya que todo será controlado electrónicamente.

La recaudación no será como la del Trolebús o Ecovía en donde la gente paga físicamente con monedas. Por eso está prevista una campaña de socialización para indicar a la ciudadanía cómo usar el servicio. De hecho, en la fase inicial de operaciones habrá personal de apoyo que guiará a la gente.

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El Metro de Quito no operará al 100% de su capacidad. Es decir, no funcionarán los 18 trenes, sino diez u ocho. Los certificados de las pruebas estarán listos en noviembre de este año.

Las operaciones comenzarán de forma gradual porque los usuarios necesitarán un acompañamiento apropiado. El Metro cambia radicalmente la forma de los desplazamientos y la movilidad en todo el Distrito Metropolitano y eso requiere de un proceso de adaptación.

Por eso se definió tener un tiempo de operación sin costo que será algunas semanas. Se trata de una práctica cotidiana en el país como cuando comenzaron a funcionar el servicio de Trolebús y el Tranvía de Cuenca.

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