Los embalses se recuperan con las lluvias en el Austro y la Amazonía

Las lluvias registradas a escala nacional durante el último fin de semana aliviaron, en parte, el estiaje en ríos que son los principales afluentes de las centrales hidroeléctricas. Los embalses de Paute-Molino y Mazar mejoraron sus niveles, lo que permitió que los cortes de energía eléctrica se suspendan hasta el próximo 1 de enero de 2024.

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Esta situación podría variar si el periodo de sequía persiste; sin embargo, el pronóstico es alentador. Vladimir Arreaga, director de Pronósticos del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), sostuvo que esta semana habrá lluvias "menos intensas, pero frecuentes".

Su intensidad será débil y moderada en la región Interandina. En la Amazonía se pronostica que ocurran lluvias de mayor intensidad en todas sus provincias, especialmente en Napo, Morona Santiago y Sucumbíos.

Además, para la última semana de 2023, se espera un incremento de las precipitaciones.

Arreaga explica que es difícil determinar si la cantidad de agua lluvia será suficiente para recuperar y mantener el caudal necesario de los ríos. No obstante, asegura que las precipitaciones deben ser constantes por varios días para lograr estabilidad.

Etapa, la empresa que brinda servicios de agua potable, saneamiento y telecomunicaciones en Cuenca, sostiene que se necesitan 10 días de lluvia continua para salir de la sequía. Tras las lluvias de los últimos días, el nivel de los caudales se mantiene en estado normal, pero el cantón cumplió 111 días de estiaje.

El 18 de diciembre, el Ministerio de Energía destacó la mejoría del estado de los embalses. Del 9 al 15 de diciembre, el caudal promedio en Mazar (Cañar) fue de 26.6 metros cúbicos por segundo (m3/s) y del 16 al 18 de diciembre subió a 84.5 m3/s promedio.

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En Paute-Molino (Azuay - Morona Santiago), del 9 al 15 de diciembre, el caudal promedio se mantuvo en 20.3 m3/s, mientras que, del 16 al 18 diciembre, se incrementó a 35.2 m3/s.

A esto se suma el despacho de 1,112 MW para el 18 de diciembre, desde la central Coca Codo Sinclair (Napo - Sucumbíos). El nivel de agua también se incrementó en el río Coca.

El especialista del Inamhi, Vladimir Arreaga, asegura que el fenómeno de El Niño en la Amazonia no siempre causa un déficit de precipitaciones. Aclara que lo ocurrido en septiembre y octubre de este año "fue un comportamiento anómalo de precipitaciones" más que una consecuencia del evento natural.

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Los primeros meses de 2024, en cambio, serán de gran variabilidad. El Inamhi prevé nuevos periodos con ausencia de lluvia.