Indagación a Metro de Quito podría reabrirse

La nueva filtración de documentos revela que el Metro de Quito y la Ruta Viva serían parte de la trama de sobornos de Odebrecht. En 2017, la Fiscalía abrió un expediente para investigar el posible pago de coimas en el Metro y la fiscal Thania Moreno realizó un allanamiento a las oficinas de la empresa, pero quedó ahí. El caso se archivó. 

 

Según explicó Moreno, por mensaje de texto: "Yo abrí la indagación por la denuncia de la asambleísta María José Carrión, se recopiló la información de las asistencias de México, Panamá y Brasil en las cuales no hay nada sobre el Metro de Quito. Odebrecht nunca proporcionó esa información. Además, con el informe de Contraloría el caso se archiva y es ratificado por el superior".

 

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La fiscal agrega que "el efecto del archivo es indicar que hasta el momento no hay elementos, pero de existir nuevos se deberá reabrir".

 

Queda la interrogante de si Odebrecht ocultó información, pero la constructora no puede responder. 

 

En un boletín, con el nuevo logo que cambió trás el escándalo, indican que "en mayo de 2017, la Fiscalía General del Estado y Odebrecht suscribieron un Acuerdo de Cooperación Eficaz (...) No podemos manifestarnos ante los medios de comunicación al respecto del acuerdo ni sobre la materia de cooperación. Los mismos que son de carácter confidencial".

 

Entre tanto, la Comisión Nacional Anticorrupción firmó un convenio con el Municipio de Quito y anuncian una investigación.

 

Según Jorge Rodríguez, de la Comisión Anticorrupción, “habrá que revisar desde el inicio de la convocatoria a las empresas internacionales para la construcción del Metro. Posteriormente, todo el proceso desde Barrera a Rodas. Cómo escondieron la documentación que obtuvieron en Brasil autoridades de la Fiscalía”. 

 

La Ruta Viva se contrató inicialmente por 84 millones de dólares y el Metro de Quito, por más de 2 mil millones de dólares. 

 

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Han pasado dos años y medio desde que estalló el escándalo por la trama de sobornos de Odebrecht y ahora una nueva filtración pone en la mira a dos obras que hasta el momento no habían sido tocadas: el Metro de Quito, cuyo contrato fue firmado por el entonces alcalde Mauricio Rodas, y la Ruta Viva, construida para unir Quito con el aeropuerto de Tababela, suscrita por el gerente de Movilidad y Obras Públicas de la época, Germánico Pinto, durante la administración de Augusto Barrera.

 

Según los archivos del sistema encriptado Drousys, diseñado por Odebrecht para el pago de coimas, se desviaron 5 millones de dólares por el Metro de Quito y más de 2 por la Ruta Viva.

 

Esto se suma a los sobornos ya conocidos por 5 megaobras del correísmo:

 

- Refinería del Pacífico

- Acueducto La Esperanza

- Trasvase Daule Vinces

- Poliducto Pascuales Cuenca

- hidroeléctrica Manduriacu

 

El total en Ecuador sobrepasa los 51 millones de dólares, de acuerdo con la investigación periodística.