Los incendios no dan tregua en provincias como Cotopaxi, Guayas y Chimborazo

Hasta ocho metros alcanzan las llamas en el cerro Quinticusig, al sur de Sigchos, que ya se han extendido hasta un bosque primario de Arrayán.

Para controlar la emergencia, los brigadistas han implementado una nueva estrategia: con maquinaria del Municipio y la Prefectura, abren un camino de un kilómetro a través de la montaña para permitir el ingreso de autobombas hasta los 3 400 metros de altura.

Un grupo de 100 comuneros y 50 militares, con machetes y azadones, despeja la maleza creando una trocha de 800 metros de largo y 3 de ancho.

Mientras tanto, 80 bomberos instalan conexiones de mangueras cada 100 metros para humedecer la tierra y frenar el avance del fuego.

Hasta el momento, el fuego ha consumido 1 600 hectáreas de vegetación.

En el norte de Guayaquil, la tarde de este martes, 10 unidades del cuerpo de bomberos, con un camión cisterna, combatieron un incendio forestal en el cerro del sector Bellavista.

Al ver que el fuego se propagaba y ante la amenaza de que alcance sus viviendas, habitantes también ayudaron a apagarlo con mangueras y baldes.

Sin embargo, horas después el incendio se reactivó. Esta vez, los bomberos tuvieron que ingresar por diferentes puntos.

Le puede interesar: Incendios forestales en Bolivia ponen en riesgo la supervivencia de pueblos indígenas

Unos entraron por la parte posterior de una universidad y otro grupo accedió por la ciudadela San Pedro y la ciudadela Santa María de las Lomas.

Los brigadistas tuvieron dificultades para escalar el cerro debido a la oscuridad y a la espesa vegetación. Los trabajos se extendieron hasta las 03h30. El fuego consumió ocho hectáreas.

En Guamote, en la provincia de Chimborazo, bomberos y comuneros se unieron para controlar un incendio forestal en el sector San Pablo de Guantug. Las llamas arrasaron con 22 hectáreas de páramo y bosques de pino.