El Inamhi advierte lluvias intensas en la Sierra que llegarán al norte del Litoral y la Amazonía

Las lluvias intensas previstas por el Instituto Nacional de Hidrología y Meteorología (Inamhi) se registran la tarde y noche del 29 de abril en la Sierra y zonas de cordilleras. Según la entidad, es probable que se intensifiquen en las próximas horas, acompañadas de tormentas.

Las proyecciones del Inamhi también apuntan a que las fuertes lluvias se extiendan hasta el norte del Litoral y la Amazonía. En la primera zona, la lluvia alcanzará cantidades de precipitación máxima que superará los 42 milímetros al día. En las provincias amazónicas, mientras tanto, el nivel será muy alto, con hasta 54 mm de lluvia al día.

Estas condiciones motivaron la activación de la alerta meteorológica No. 25 por lluvias, tormentas y viento.

En el Litoral, los eventos de mayor intensidad ocurrirán en las provincias de Esmeraldas, Santo Domingo de los Tsáchilas, Los Ríos, Manabí y estribación de cordillera occidental. Mientras tanto, en la región Interandina será en las provincias de Pichincha, Cotopaxi y Bolívar.

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En la región Amazónica, las lluvias más fuertes serán en el sur de la región, especialmente en Morona Santiago y Pastaza.

Según el Inamhi, este escenario responde al ingreso de masas de aire húmedo, el calentamiento diurno (inestabilidad atmosférica) y la favorable circulación de vientos en los diferentes niveles de la tropósfera.

El Inamhi advirtió que es probable que exista acumulación de agua en hogares, negocios y caminos susceptibles. Asimismo, las condiciones de las vías podrían verse afectadas por deslizamientos de tierra y blancos de neblina.

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La institución también señaló la posibilidad de desbordamientos de los cuerpos de agua. Mientras tanto, Etapa, empresa de agua y alcantarillado de Cuenca, pidió a los ciudadanos mantenerse alejados de las orillas de los ríos, ya que podrían crecer repentinamente.

El pasado 27 de abril, Etapa anunció que el caudal del río Machángara alcanzó los 14,20 metros cúbicos por segundo (m3/s), por lo que activó una prealerta por posible desbordamiento. Hasta la mañana del 29 de abril, el cuerpo de agua mantenía un estado normal, con 6,30 m3/s.