Fuerte temporal golpea a varias provincias de Ecuador: Cerca de 1.500 familias aisladas en Cotopaxi

El intenso temporal golpea a varias provincias del país. En el cantón Sigchos, en Cotopaxi, son cerca de 1.500 familias que permanecen aisladas a causa de los deslaves y el daño de vías.

Deslizándose entre el lodo, así tienen que trasladarse los habitantes del recinto El Guarumal, del cantón Sigchos, para poder salir de su comunidad hasta el centro de la localidad.

Telmo Pilaguano, presidente de la parroquia Chugchilan, comenta que desde hace 15 días no ha parado de llover y esto ha provocado varios deslaves, que al momento mantienen incomunicadas a cerca de 1.500 familias que viven en 7 recintos de la zona.

Segundo Chusin, habita en la comunidad de Yanayacu, dice estar preocupado porque desde hace dos semanas no ha podido comercializar los 25 litros de leche que produce diariamente su ganado. “No tenemos la vía para poder sacar productos para poder vender y traer algo de ganancia”.

En la comunidad de Cuisana, los pobladores están angustiados, pues hay tres tramos de la vía Chugchilan - Quilotoa que se ha destruido. “Esta vía es grande, transitable, y nosotros no podemos dar productos, lamentablemente esa zona es productiva con papá, haba, cebada, melloco, entonces no podemos salir hacer una feria”, comenta Luis Guanotuña, habitante de la comunidad Cuisana.

Además, en las comunidades más alejadas, localizadas montaña arriba, se conoce que han colapsado 5 puentes tras el desbordamiento del río Fátima y cerca de una veintena de viviendas han quedado destruidas a causa del fuerte temporal.

Por otro lado, las lluvias también golpean a la provincia de Los Ríos. Las intensas lluvias en el sector 12 de Octubre, zona rural de Babahoyo, provocaron inundaciones. El agua, incluso, entró hasta varias viviendas, por lo que algunas personas tuvieron que ser trasladadas a casas temporales.

Pero Babahoyo no es el único cantón afectado, en la zona rural de Montalvo, los caminos han quedado destruidos y llenos de agua. Los pobladores aseguran que esta es una situación que han vivido desde hace varias décadas, pues cada que llega el invierno se desborda el río Santa Rosa.

Mientras que en el recinto La Maravilla encontramos a Jacinto Rocafuerte, preocupado por el cultivo de arroz que sembró hace dos meses y que ahora está bajo el agua.

Una situación que se repite para otros agricultores de la zona, pues hay cerca de mil hectáreas de cultivos destruidas.