Fenómeno La Niña, que provoca frío en la Costa y exceso de lluvias en la Sierra y Amazonía, se alargaría hasta 2023
Inamhi dice que las perspectivas climáticas indican que continuarán las temperaturas atípicas en los siguientes meses
El fenómeno de La Niña está presente en las costas ecuatorianas y es el culpable de las bajas temperaturas en la Costa y el exceso de lluvias en la Amazonía y el callejón interandino.
Que el mar se enfríe tiene consecuencia, explica Guillermo Flores, técnico del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi).
“Suele disminuir la probabilidad de precipitaciones en el perfil costanero, pero se incrementa en la región amazónica y en ciertas zonas de la Sierra”.
Los hechos así parecen confirmarlo, porque este año se han registrado deslizamientos, inundaciones, deslaves que han dejado a poblaciones enteras aisladas y a decenas de personas damnificadas.
Sin embargo, desde Gestión de Riesgos aseguran que los eventos de este año no son mayores a los de años anteriores.
“Las estadísticas nos dicen que los número son similares a los del año pasado, lo que sí ha variado es el impacto porque este año hemos tenido un par de eventos con mayor impacto en vidas humanas”, dice Virgilio Benavides, del Servicio Nacional de Gestión de Riesgos.
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Pero más que las estadísticas, lo que importa es justamente eso, las vidas humanas; sobre todo porque el Inamhi asegura que las probabilidades apuntan a que La Niña no se irá pronto.
“Las perspectivas climáticas nos indican que continuarán las temperaturas atípicas en los siguientes meses y eso indicaría que La Niña puede alargarse hasta el siguiente año”, explica el especialista Flores.
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¿Qué se ha hecho para planificar y enfrentar los desastres? Preparados o no, La Niña está presente y por lo visto seguirá aquí por algunos meses más.
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