En dos ciudades y una provincia del Ecuador se prohíbe totalmente el uso de pirotecnia sonora

Una provincia y dos ciudades del país tienen ordenanzas y disposiciones que prohíben totalmente el uso de pirotecnia sonora. Se trata de Galápagos, desde el 2018, Baños de Agua Santa, en Tungurahua, desde el 2023 y recientemente se sumó Cotacachi (Imbabura), en septiembre de este año.

Las sanciones por fabricación, tenencia y uso de pirotecnia oscilan entre el 50% de un salario básico, USD 235, por infracciones leves, hasta dos salarios básicos por infracciones graves, USD 940.

Hay ciudades que tienen regulaciones para el uso de la pirotecnia, pero no la prohíben. Es el caso de Cuenca (Azuay). Su Concejo Cantonal aprobó, la semana pasada, la ordenanza de control de contaminación por ruido. En ella se establece que los juegos pirotécnicos no podrán usarse después de la medianoche, ni antes de las 06:00.

Otros municipios trabajan en ordenanzas para la regulación. El Concejo Metropolitano de Quito tiene el trabajo avanzado. La Comisión de Salud aprobó una propuesta que prohíbe completamente la pirotecnia sonora en la capital. Solo está pendiente el segundo debate en el Concejo Metropolitano para que entre en vigencia.

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“La propuesta está en las manos del alcalde, tiene la competencia para ponerlo en el orden del día y su definitiva aprobación. Está previsto que sea en las primeras semanas de enero”, manifestó el concejal Andrés Campaña.

Este proyecto solo permite el uso de pirotecnia insonora que deberá ser comercializada con permisos y licencias, además promueve otros espectáculos con luces LED, drones y mapping para preservar las tradiciones festivas.

Otros cantones del oriente como Lago Agrio, Archidona y Putumayo trabajan en ordenanzas que está previsto que se debatan en el 2025, según la Asociación de Municipalidades del Ecuador (AME).

La limitación en el uso de pirotecnia surge porque los altos decibeles y la contaminación causan daños en la salud que pueden ser severos en personas con autismo y animales.

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