¿De qué depende el fin de la pandemia de COVID-19?

El 11 de marzo de 2020, la Organización Mundial de la Salud (OMS) determinó que el COVID-19 podía caracterizarse como una pandemia por los niveles de propagación y la gravedad de la enfermedad, que para ese momento dejaba cientos de fallecidos.

Dos años y seis meses después y luego de la muerte de más de 17 millones de personas en el mundo, la misma entidad, encargada de vigilar la evolución del virus a nivel mundial, dice que el fin de la pandemia podría estar cerca.

El director general de la OMS, Tedros Ashanom Ghebreyesus, dijo el pasado miércoles 14 de septiembre que desde que inició la pandemia, nunca se ha estado en mejores condiciones para poner fin a la pandemia.

El titular de la organización dijo que la semana pasada, del 5 al 11 de septiembre se registró la cifra más baja de fallecidos desde marzo de 2020; aunque aclaró que no es momento de descuidarse ni tampoco oficializó el fin, únicamente dijo que está cerca.

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De acuerdo con la plataforma 'Nuestro mundo en datos', el promedio de casos nuevos en los últimos siete días supera los 500 mil. Estados Unidos es uno de los países más afectaos en todo el mundo, seguido de India, Brasil y Francia. Sin embargo, en la última semana, Suiza es uno de los más afectados, tal como muestra el siguiente mapa interacivo.

En Ecuador el escenario es similar. El pasado 13 de septiembre de 2022, el Comité de Operaciones de Emergencias (COE) dio una rueda de prensa en la que informaron que la situación de Covid-19 está controlada y que los casos positivos continúan a la baja.

De hecho, el ministro de Salud, José Ruales dijo que la segunda semana de septiembre, en el país se registró la cantidad más baja de contagios en lo que va del año. Aunque este 13 de septiembre, Ecuador superó el millón de pacientes que se han contagiado con COVID-19 desde marzo de 2020, cuando se identificaron los primeros casos.

Pichincha es la ciudad con más contagios y supera en más del 100% a la siguiente provincia en la lista, Guayas. Luego aparece Manabí y Azuay.

El escenario de muertes relacionadas al coronavirus también es alentador para los ecuatorianos. A pesar de que durante toda la pandemia han muerto 35.885 personas, en la última semana se registra un solo deceso, siguiendo los datos del Ministerio de Salud.

El virus no va a desaparecer de la noche a la mañana. Hablar del fin de la pandemia significa pasar de una enfermedad que se ha propagado en una área geográficamente amplia, a una epidemia, cuando las infecciones son en una población específica durante un tiempo determinado.

Al inicios de la pandemia, cuando se conocía poco del covid-19, investigadores ingleses, citados por el portal de la BBC, determinaron que se lograría bajar el nivel de alerta cuando un 60% de la población ha estado expuesta al coronavirus, ya sea mediante la aplicación de las dosis de a vacuna o por contagio.

Según 'Nuestro mundo en datos', ya hay más de 4 mil 900 millones de personas que han recibido al menos una dosis de la vacuna, lo que representa un 63,5% de la población mundial.

La OMS señala que la inoculación ha sido dispareja porque sólo 57 países -casi todos de renta alta o media alta- han vacunado al 70% de sus habitantes y alrededor de mil millones de personas en países de bajos ingresos todavía no han recibido las dosis.

El médico internista David Larreátegui, dice que es innegable que a nivel mundial el virus ha cedido. Sin embargo, sí le preocupa que en países que no han sido expuestos a las nuevas variantes, y que no han tenido acceso a las vacunas, la inmunidad no haya sido alcanzada del todo.

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Se trata de una carrera en la que compite la compite la humanidad contra el virus. Por un lado los avances científicos se esfuerzan por entregar vacunas más efectivas y por otro, la mutación del virus puede acelerarse y complicar más el manejo de la pandemia.

Sin embargo, cada vez es más necesario aplicar las dosis de refuerzo y ahí es donde podría dificultarse alcanzar la inmunidad.

Lo cierto es que ni siquiera las dosis existentes han tenido la acogida necesaria. En Ecuador, la vacunación se estancó en los últimos meses, a pesar de las campañas que emprende el Gobierno para promover la inoculación.

La aplicación de la primera y segunda dosis están casi al mismo nivel; es decir, 14,1 millones de personas cuentan con el esquema completo. Sin embargo, solo la mitad tienen la tercera dosis y la cuarta a penas 1,8 millones.

El esquema completo en Ecuador implica únicamente las dos primeras dosis. Siguiendo ese criterio, la provincia que menor tasa de vacunación refleja es Morona Santiago con un 65,23%; en contraste con Carchi que es la provincia con más vacunados.

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Larreátegui dice que tras dos años de pandemia el mensaje que tienen los ciudadanos debe ser clave: si presento síntomas debo usar mascarilla y aislarme. El bajar el nivel de alerta no significa descuidar las medidas básicas para evitar contagios.

Sin embargo, sí le preocupa que el nivel de atención y recursos que se destina al covid-19, en grado de pandemia, disminuya y que pueda provocar nuevas olas de contagio. De hecho, indica que se esperan nuevas olas para los meses de diciembre y enero como ha sido típico.

En la Asamblea Mundial de Salud, celebrada del 22 al 28 de mayo en Ginebra, la OMS instó a que los países prioricen la atención oportuna ante el covid-19.