Contraloría reúne en informe irregularidades en repotenciación de Refinería de Esmeraldas

Se trató de uno de los proyectos emblemáticos del gobierno de Rafael Correa: repotenciar la Refinería de Esmeraldas y llevarla a procesar 110 mil barriles diarios de petróleo. 

En el 2008, el mandatario declaró la emergencia en la infraestructura y arrancó el proceso en el que se debía invertir 187 millones de dólares. 12 años después se han gastado más de 2.500 millones de dólares y la refinería sigue en estado crítico.

Esto es, en resumen, lo que dice la Contraloría en un informe que, por primera vez, auditó la mayoría del proceso de rehabilitación y revela cómo el caos, el descontrol y la corrupción fueron el denominador común, tanto que el escándalo no se pudo ocultar y por ello varios altos funcionarios del régimen anterior pagan sentencias por actos de corrupción.

De acuerdo con el documento, el caos es tal que ni siquiera las cifras cuadran. Según Petroecuador, se gastaron 2.304 millones de dólares, pero la Contraloría asegura que los datos de la petrolera no son confiables. 

Al menos, estarían faltando otros 230 millones en proyectos no contemplados ni fiscalizados, e incluso en obras que ni siquiera tienen soporte en documentos.

Según la Contraloría, la repotenciación costó más de 2.500 millones de dólares, mientras Petroecuador, hasta la fecha, busca consolidar sus cifras.

Más allá de las discrepancias en las cifras, queda claro que la corrupción y la mala planificación, que se cuentan con detalle en el informe, terminaron por echar a la basura la millonaria inversión, tanto que, según el Gobierno, aún se requieren otros 1.400 millones de dólares para reparar lo mal arreglado.