En la Catedral de Guayaquil se ofreció la primera misa de Luis Gerardo Cabrera como cardenal
Obispos, vicarios y autoridades, incluyendo el presidente Daniel Noboa, participaron de la celebración del sexto cardenal en la historia de Ecuador.
La Catedral de Guayaquil lució llena para la primera misa de monseñor Luis Gerardo Cabrera como Cardenal de la Iglesia Católica. Tres mil personas acudieron, ocuparon las bancas y hasta los pasillos, entre ellos estuvo la prefecta del Guayas, Marcela Aguiñaga y el presidente Daniel Noboa, junto a la primera dama, Lavinia Balvonesi.
La celebración de acción de gracias arrancó a las 10:00 del sábado, 14 de diciembre. El Cardenal llegó a la Catedral luego de recorrer a pie seis calles, desde la Iglesia San Francisco. Ingresó con el hábito coral rojo y blanco, tradicional de su nuevo cargo; luego usó una casulla amarilla y blanca, acompañado de obispos y vicarios, mientras el coro entonaba el canto Pueblo de reyes.
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Frente a los 220 sacerdotes de las parroquias de Guayaquil, que ocuparon las primeras filas, el Nuncio Apostólico en Ecuador, Monseñor Andrés Carrascosa, leyó la carta de creación de cardenal.
Un puente para la paz
Ya en su homilía, el Cardenal se refirió a su designación. "He pasado de la sorpresa a la certeza de que es una gracia del Señor a este pueblo que cree en su palabra", aseguró.
Luego, compartió la comunión con quienes coparon la iglesia.
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Antes de la bendición, el presidente Noboa tomó la palabra y dijo que, más allá de sus nuevas funciones, el cardenal Cabrera tiene la misión de seguir construyendo puentes para la paz y consolar a un país "tantas veces maltratado".
Con la bendición final concluyó la eucaristía entre aplausos de los presentes. De esta manera, Luis Gerardo Cabrera se convierte en el sexto cardenal en la historia de Ecuador.
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