¿La presencialidad afectó la economía familiar?

Carolina Carrillo es el sostén de su familia. Ella trabaja en la parte administrativa de una empresa que vende seguros médicos. Durante un año y siete meses, desde que empezó la pandemia, realizó sus actividades vía telemática, acogiéndose a la modalidad de teletrabajo.

En enero de este año, la empresa reanudó sus actividades presenciales, por lo que Carrillo tuvo que rever la administración de sus finanzas. Ahora tiene que planificar semanalmente los gastos de transporte, alimentación fuera de casa e incluso, en ocasiones, debe buscar a alguien que pueda cuidar de sus hijos.

"El primer mes casi no me alcanza", cuenta la trabajadora y explica que con el tiempo aprendió a ahorrar y administrar su sueldo.

Así como Carrillo, cientos de personas han tenido que retornar a la presencialidad y ajustar la economía familiar. Elizabeth Arellano, Ejecutiva del programa de Educación Financiera de Produbanco, dice que hay que "reorganizar el presupuesto para priorizar los gastos".

La pandemia por el COVID - 19 también transformó las prioridades económicas en muchas familias, generando un cambio importante en el comportamiento del consumidor enfocado sobre todo al ahorro.

En Ecuador, según cifras de Asobanca, para agosto del 2021, el saldo de los depósitos incrementó un 12,5%, alcanzando una cifra de $38.527, de estos, el 37% son depósitos a plazo y el 27% son depósitos de ahorro. Esto demuestra que, a comparación de años pasados, los usuarios se preocupan más por ahorrar.

Respecto a la alimentación, la experta recomienda preparar alimentos en la casa para reducir las comidas fuera. Por ejemplo, se puede optar por comer en restaurantes solo dos veces a la semana o incluso al mes.

En cuanto al transporte, es importante utilizar buses, bicicleta o caminar, para reducir en lo más que se pueda el gasto en taxis. En caso de usar combustibles, es recomendable programar el consumo de la gasolina del mes y utilizar lo menos posible el auto.

Tampoco se puede perder del mapa los gastos propios de la pandemia: mascarillas y alcohol en diferentes presentaciones. Es importante contar con este gasto en las cuentas de cada mes.

Arellano recomienda utilizar la técnica PERC: postergar, eliminar, reducir y conservar. Es decir, decidir qué gastos deben realizarse en ese mes y cuáles pueden reprogramarse o eliminarse. Además, es preferible evitar endeudarse para cubrir gastos básicos del hogar.

De acuerdo a arellano