Un misil ruso cayó accidentalmente en territorio propio

El proyectil explotó minutos después de caer en una transitada avenida en la localidad de Bélgorod. El incidente dejó 3 heridos y dejó un orificio de 20 metros de diámetro en el centro de la ciudad fronteriza con Ucrania.

Además, varios edificios del lugar, vehículos y líneas eléctricas resultaron afectadas tras la caída del misil ruso, que no ha sido especificado. El Ministerio de Defensa confirmó que inició una investigación esclarecer las causas del accidente.

Las autoridades rusas han asegurado que van a reparar los daños y que hay una investigación en marcha sobre lo sucedido.

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Este no es el único incidente de este tipo, en octubre un avión de combate cayó sobre un edificio en el sur de Rusia y dejó 16 muertos y más de una docena de heridos.

Según expertos militares ucranianos, en Bélgorod cayó una bomba aérea, de las que Rusia lanza con frecuencia contra territorios fronterizos ucranianos. Estos proyectiles pueden ser lanzados a una distancia de hasta 70 kilómetros y son capaces de burlar las defensas antiaéreas de Kiev.

De acuerdo con la Fuerza Aérea ucraniana, en las últimas semanas los rusos lanzaron unas 20 bombas de ese tipo en toda la línea del frente y para interceptarlas se requieren armas más modernas, según medios locales.

Mientras, el portavoz de la Fuerza Aérea, Yuriy Ignat, advirtió de que bombas como la de Bélgorod "podrían caer también en otros lugares", porque los rusos "lo hacen todo rápido" y descuidan la calidad. Según Ignat, el proyectil que cayó en Bélgorod es "una vieja bomba soviética", pero apta para ser modernizada. El portavoz reiteró que por eso las fuerzas ucranianas esperan recibir más sistemas de defensa aérea de largo alcance.