Brasil se asfixia entre la sequía, el cambio climático y el humo de los incendios

Brasil enfrenta una crisis ambiental de proporciones alarmantes. El humo generado por los incendios forestales ha agravado los ya elevados niveles de contaminación del aire en el país, afectando la salud de millones de personas y paralizando diversas actividades.

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La investigadora Karla Longo, del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales, advierte que las nubes de humo cubren hasta el 80% del territorio nacional, multiplicando la contaminación y asfixiando a regiones enteras. "El cielo luce horrible, el sol no se ve, está muy borroso", describió un informe de AFP Monteiro, subrayando que el aire en Brasil ya es seco de por sí, y ahora está irrespirable debido a la contaminación y los incendios.

San Pablo, una de las ciudades más grandes de América Latina, ha sido identificada como una de las urbes más contaminadas del mundo, según datos de IQAir, una empresa suiza especializada en la vigilancia de la calidad del aire. La situación ha empeorado tanto que el uso de mascarillas ha vuelto a ser una medida común en ciudades como Porto Velho y otras zonas de la Amazonia, que se encuentran en emergencia por la peor ola de incendios en casi dos décadas, de acuerdo con el observatorio europeo Copernicus.

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El impacto en la salud es devastador. Un sondeo del Instituto Datafolha reveló que el 40% de los habitantes de San Pablo y Belo Horizonte afirman haber experimentado problemas de salud relacionados con la contaminación. Además, en uno de los principales hospitales de Brasilia, los casos de afecciones respiratorias se han disparado, con un aumento de hasta 20 veces sobre el promedio habitual, según reportó el diario El Clarín.

Las autoridades han tomado medidas drásticas: las clases en varias regiones han sido suspendidas debido a la peligrosidad del aire, calificado como altamente tóxico. Los expertos recomiendan a la población hidratarse constantemente y acudir de inmediato a un centro de salud ante cualquier síntoma respiratorio.

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