Unos 200 estudiantes saquearon este sábado grandes supermercados en Chilpancingo.
Unos 200 estudiantes saquearon este sábado grandes supermercados en Chilpancingo, capital del estado mexicano de Guerrero (sur), continuando con las protestas por la desaparición de 43 estudiantes de la cual se cumple un mes el domingo, sin que se hayan reportado avances en su búsqueda.
Después de las protestas que acabaron en los últimos días con destrozos en edificios oficiales e incluso con la quema parcial de la sede de Gobierno estatal, varias decenas de manifestantes se enfocaban este sábado en los comercios y exigían el retorno con vida de los estudiantes, desaparecidos tras un ataque de policías locales y narcotraficantes en la ciudad de Iguala el pasado 26 de septiembre.
Al menos dos grandes supermercados del centro de Chilpancingo quedaron con vidrios rotos y estantes por los suelos por el saqueo de los jóvenes y ahora son resguardados por agentes antimotines, constató la AFP.
"Se metieron a fuerza muchísimos. Entraron y empezaron a saquear todo y a regalarle a la gente", explicó un trabajador de uno de los grandes almacenes afectados, que pidió permanecer bajo anonimato.
Además de alimentos, algunos estudiantes destrozaron y se llevaron también artículos de electrónica, mientras otros pintaban "Todo gratis" en las paredes de los comercios ahora cerrados, según trabajadores.
Un grupo de maestros apoyó esa acción a las puertas de un supermercado saqueado gritando consignas en contra de que "el Estado criminalice a los muchachos" desaparecidos, indicó Tonantzin Beltrán, miembro de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG).
El viernes, familiares y compañeros de los estudiantes desaparecidos de la escuela rural de magisterio manifestaron su desconfianza en la investigación federal y rechazaron ser vinculados "con grupos delictivos", después de que la fiscalía general apuntase que los universitarios fueron víctimas de una confusión del cartel local Guerreros Unidos con otro grupo rival la fatídica noche del ataque.
Mientras tanto, el viernes la fiscalía elevó de 30 a 38 la cifra de cadáveres hallados en tumbas clandestinas encontradas desde el inicio de la búsqueda. El organismo ya informó que 28 de ellos no corresponden a los chicos.
A casi un mes del crimen que ha conmocionado dentro y fuera de México, las autoridades siguen buscando al revocado y prófugo alcalde de Iguala, José Luis Abarca, a quien se acusa de ordenar el ataque por temor a que los estudiantes sabotearan un evento público de su esposa, también fugitiva y hermana de tres destacados narcotraficantes.
Recomendadas