Correa pide unidad para enfrentar la "restauración conservadora" en la región
El primer mandatario destacó los cambios que hubo en Latinoamérica en los últimos años.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, pidió hoy en Bolivia unidad a la izquierda latinoamericana para hacer frente a lo que consideró una "restauración conservadora" que, a su juicio, busca acabar con los "Gobiernos progresistas" de la región.
El mandatario ecuatoriano hizo este llamado en un encuentro social organizado por sindicatos leales al Gobierno de Evo Morales en la ciudad boliviana de Santa Cruz de la Sierra (este), en horas previas a la inauguración de la Cumbre de los 77 países en desarrollo y China (G77).
Correa destacó los cambios que hubo en Latinoamérica en los últimos años, mismos que, según dijo, fueron logrados por los países "más unidos que nunca".
"Pero atentos, la derecha no es tonta, las élites que siempre nos han dominado (...) ya superaron el aturdimiento en que las dejó la debacle del neoliberalismo, la llegada de Gobiernos progresistas y claramente a nivel regional hay una restauración conservadora que quiere acabar con estos Gobiernos progresistas", sostuvo.
"Hay una restauración conservadora en marcha, una derecha nacional e internacional con estrategias de poder coordinadas, articuladas y por eso los pueblos de nuestra América, los movimientos progresistas y de izquierda también tenemos que estar articulados, más unidos, más coordinados que nunca", insistió.
Correa mencionó como ejemplo de ello el "asedio" al Gobierno del venezolano Nicolás Maduro, a quien ratificó su respaldo.
También aseguró que hay un "asedio permanente" de la derecha a los llamados Gobiernos progresistas a través de "instrumentos de destrucción masiva de la verdad que se dicen medios de comunicación pertenecientes a las oligarquías".
"Cabría preguntarse si una sociedad verdaderamente libre puede depender de la información que nos den negocios privados, propiedad de media docena de familias", sostuvo.
También arremetió contra la Organización de Estados Americanos (OEA), a la que criticó por tener su sede en el país que ejerce un "criminal bloqueo a Cuba", en alusión a Estados Unidos.
En cuanto al G77, destacó que se trata de un bloque que surgió "para dar voz a los sin voz" e insistió en pedir unidad para "cambiar un orden internacional que no sólo es injusto, es inmoral".
"No se está en función de la justicia, ni siquiera de la lógica, tan sólo del poder del más fuerte, del más poderoso, el capital sobre los seres humanos. Los mercados controlando las sociedades y no en función de nuestras sociedades", señaló.
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