Brasil es el país con la tasa más alta de asesinatos a personas de la comunidad LGBTIQ+ del mundo.
En Brasil, el Pleno del Supremo Tribunal Federal comunicó el 22 de agosto que los actos ofensivos y de violencia cometidos contra las personas de la comunidad LGBTIQ+ ahora podrán ser castigados con prisión, al ser catalogados como insultos raciales.
El Pleno catalogó que brindar protección bajo la ley a los miembros de la comunidad LGBTIQ+ es un "imperativo constitucional". Desde el 2019, la homofobia ya era considerada un delito, pero esta solo aplicaba en insultos contra la comunidad en general, no contra los individuos.
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Esta impunidad a los individuos fue apelada por la Asociación Brasileña de Lesbianas, Gais, Bisexuales, Travestis, Transexuales e Intersexuales (ABGLT), quien llevó el caso ante el tribunal. Ahora, tanto ataques contra el individuo como contra el grupo son consideradas injuria, la cual puede enfrentar a dos y cinco años de prisión.
La ley de injuria racial
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, sancionó la ley de injuria racial para condenar a prisión en los casos de racismo en enero del 2023. Tras la actualización de la ley, esta también se aplicará a casos que sucedan en cualquier tipo de evento social.
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La violencia contra las personas LGBTIQ+ en Brasil
Brasil tiene la tasa de asesinatos a personas de la comunidad LGBTIQ+ más alta del mundo. Solo en el 2021, al menos 300 miembros fueron asesinadas, según datos de la ONG Grupo Gay de Bahía. Además, entre el 2008 al 2022, 1 741 personas trans fueron asesinadas.
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