La pesca incidental de tiburones en Ecuador: ¿quién tiene la competencia?

El pasado jueves 2 de septiembre la Asamblea Nacional aprobó el proyecto de reformas al Código del Ambiente, con 117 votos, sin embargo excluyó la propuesta de moratoria a la comercialización de pesca incidental de tiburón.

Ante las críticas de la opinión pública, el legislativo informó que era la función Ejecutiva la encargada de emitir el reglamento. Así, en un documento dirigido al ministro de Producción, Julio José Prado, el asambleísta Xavier Santos, solicitó que se cumpla de "forma inmediata" con las disposiciones transitorias (primera y sexta) de la Ley Orgánica para el Desarrollo de la Acuicultura y Pesca para emitir el reglamento sobre "los índices de permisibilidad, captura, y comercialización de pesca incidental".

Es que el plazo de seis meses para hacerlo culminó, pues la Ley fue publicada el 21 de abril de 2020, hace más de un año.

Entonces ¿quién tiene la competencia?

Para Cristina Cely, directora de One Health Ecuador, y especialista en bienestar animal y conservación, destaca que aunque el reglamento debe ser expedido por el Ejecutivo, la Asamblea debe presionar para que sea reglamentada "es una de las funciones del legislativo, en la primera discusión (primer debate) nadie mencionó que no era competencia del legislativo".

Ecuavisa.com consultó con el Ministerio de Producción sobre la expedición de la normativa, y la vocería de comunicación respondió que "el reglamento a la Ley está a pocas semanas de ser emitido". Asimismo resalto que en estos 100 primeros días de gestión "hemos trabajado con la FAO para producir la mejor norma posible, además, hemos socializado con los sectores involucrados".

Por su parte, la propuesta de una transitoria como la moratoria de un año de comercialización, enfatiza Cely, no es para "mejorar las poblaciones de tiburón, eso tomaría muchísimo tiempo", resalta que el objetivo es dar un espacio para que los vacíos legales sean resueltos y se fiscalicen los casos de tráfico de aleta de tiburón.

Los casos sin judicializar

Es que en mayo de 2020, se decomisaron 26 toneladas de aletas de tiburón en Hong Kong, China, 31.000 tiburones zorro y 7.500 tiburones sedosos provenientes de Ecuador. Asimismo, el 25 de septiembre del mismo año, ocho toneladas de aletas de tiburón fueron confiscadas en Perú.

Así, según Cely, durante el 2020 más de 40 toneladas entre aletas y troncos de tiburones fueron incautados por autoridades aduaneras, y en ninguno de los casos señala ha existido una sentencia ejecutoria en la que se reconozca responsabilidad penal.

UE: Alerta amarilla

El pasado 30 de octubre de 2020 la Unión Europea (UE) levantó la tarjeta amarilla para Ecuador por la pesca ilegal. Entre los argumentos expuso que el país tenía "un marco legal obsoleto que no se ajusta a las normas internacionales" y le dio un plazo de seis meses para presentar reformas sustanciales para suplir las falencias.

Frente a ello, se emitió la nueva Ley de Acuicultura y Pesca, que aún no se encuentra reglamentada y el Proyecto Acción Tiburón que se planteaba como una herramienta para fortalecer el Plan de Conservación y Manejo de la especie en el país.

La pesca incidental: ¿una amenaza disfrazada?

En Ecuador, desde el año 2007, se prohíbe la pesca dirigida a los tiburones, así como la práctica de extracción de sus aletas y el descarte de su cuerpo al mar, establecido en el Decreto Ejecutivo 486. Sin embargo, según datos de Abrams World Trade Wiki, Ecuador es el tercer exportador mundial de aletas de tiburón.

Entonces, ¿cómo determinar cuándo se trata de pesca incidental? En el Decreto mencionado no se estableció un porcentaje, lo que ha causado dificultad para determinar si es pesca dirigida o no. Por eso César Peñaherrera, experto en poblaciones de tiburones y coordinador científico de MigraMar, señala que "es lo que precisamente el reglamento tiene que moderar y empezar a poner puntos de corte, por eso la necesidad de la moratoria para que los reglamentos se institucionalicen".

Peñaherrera recalca que el espíritu de la moratoria no es afectar a los pescadores artesanales, sino poder preservar el sustento económico futuro.