Crisis en Galápagos: ya hay fecha tentativa para que se normalice el abastecimiento

Ya han pasado tres meses desde que inició el desabastecimiento en las Islas Galápagos. La falta de alimentos esenciales y la escasez de gas ha afectado a la calidad de vida de los habitantes, quienes denuncian, además, el encarecimiento de los mismos.

Todo comenzó en el mes de marzo cuando se averió el barco Isla de la Plata. Para entender su importancia, primero, hay que explicar que existen dos rutas que abastecen el archipiélago: la llamada 1-2, que sirve a Santa Cruz y San Cristóbal con los barcos Isla de la Plata (el averiado) y Fusión II, por otro lado, está la ruta 3, que sirve a las islas Isabela y Floreana, con los barcos Paola y Tania II.

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Desde entonces se ha tratado de mitigar el golpe con viajes emergentes. Por ejemplo, el lunes 26 de junio, llegó el buque Hualcopo de la Armada con 3 011 tanques de gas para Santa Cruz y San Cristobal, las más pobladas del archipiélago. Además, la Armada del Ecuador ha puesto a disposición el barco Calicuchima que ya ha realizado dos viajes con 8 600 tanques.

Pero, la pregunta es ¿hasta cuándo se mantendrá esta situación? Aquí los detalles.

Desde que el barco Isla de la Plata, de la empresa Transnave, se averió no ha podido realizar tres viajes, en cada uno, el barco transportaba 18 000 tanques de gas para suministrar al archipiélago.

Los barcos adicionales enviados para aplacar la situación no han podido atender del todo la escasez porque son de menor tamaño; se estima que el déficit se sitúa en un 40%, detalló el presidente del Consejo de Gobierno de Galápagos, Schubert Lombeida, a Ecuavisa. Por eso, Petrocomercial ha impuesto restricciones para la venta de gas, es decir, los habitantes no pueden adquirir una cantidad ilimitada.

Sin embargo, Lombeida revela que ​​​​​​la empresa ya ha logrado reemplazar el barco averiado, "se llama Cygnus estará llegando al país el día 29 de este mes y aproximadamente el 5 de julio estaría disponible para realizar un viaje a las islas, es lo que tenemos como aspiración". Aquello normalizará el abastecimiento para Galápagos.

Pero, según Lombeida, hay otro plan en marcha. A esta flota se le agregaría un nuevo barco de similares características que el de Isla de la Plata para surtir a la ruta 1-2, destaca: "Hay seis propuestas que se le ha presentado a la Subsecretaría de Puertos y Transporte Marítimo y Fluvial para designar el barco elegido".

Es un proceso que al momento se está ejecutando y se espera que a finales del mes de julio o a principios de agosto se designe este barco. "Tendríamos un tercio adicional a lo que teníamos normalmente en abril y con eso tendríamos superado la capacidad de transporte de carga a Galápagos", señaló.

Santa Cruz, la isla más poblada de Galápagos que, alberga al 65% de la población, ha sido la más afectada. De hecho, la alcaldesa de Santa Cruz, Fanny Uribe, en declaraciones, incluso, ha mencionado que las familias han tenido que recurrir a la leña para cocinar.

Lombeida reconoce la afectación ha sido mayor en Santa Cruz, y defiende que se han realizado viajes emergentes, por ejemplo, el 65% de la carga enviada en el barco Fusion fue destinado a la isla.

Pero, la otra pregunta es ¿cómo evitar que este tipo de desabastecimiento se vuelva a repetir? Lombeida señala que el problema en Galápagos es de fondo, pues hacer falta implementar una infraestructura portuaria, y deja claro que no es una tarea sencilla: "Debemos definir el sitio, hacer los análisis, estudios, diseño, financiamiento para que los barcos no tengan que usar embarcaciones intermedias para descargar toda la carga hasta muelles menores".

Actualmente no hay una descarga directa, lo que supone más demoras, en San Cristóbal, ese proceso pude tomar cuatro días y en Santa Cruz, hasta siete. "En eso estamos trabajando para hacer una hoja de ruta que no tenga retorno y determinar una mejor opción de carga óptima para Galápagos, pero esto va a tomar años".

Mientras los planes se terminan de ejecutar, ante la ciudadanía, la crisis ha provocado que se dé paso a la especulación en los precios:

De hecho, dio algunos ejemplos, el aguacate que usualmente cuesta entre un dólar y 1 50 (tamaño normal), la semana pasada llegaron a cobrar hasta a 2 50. El mismo panorama con la caja de huevos, era normal conseguir cinco por un dólar, pero ahora se ofrecen menos por el mismo precio, "apenas escasean la cubeta llega a costar hasta 10 dólares", denuncia el residente.

Sobre ello, Lombeida dice que la Intendencia de la Policía realiza los controles en todas las islas, "para verificar que los precios se respeten, tenemos denuncias que algunas tiendas han especulado los precios y hemos tomado las medidas correctivas", asegura.

Por otro lado, las islas ya están viviendo la temporada turística más movida, por las vacaciones en la región Sierra, pero también en Europa y Estados Unidos comienza el verano.

Es que vivir en Galápagos tiene sus privilegios, pero también sus vulnerabilidades, como el desabastecimiento, dice Andrés Ordoñez, director de la Cámara de Turismo de Galápagos, el sector turístico que representa el 85% de ingresos para la economía local también se ha visto afectado.

Aunque los números de turistas es positiva, sin embargo, "al no contar con un recurso indispensable como es el gas, la oferta turística se ve afectada sin mencionar los servicios complementarios".

Por ejemplo, restaurantes han tenido que reducir sus horas de trabajo mientras que otros, dice, han reducido su personal. Ordoñez estima que cerca de un 15 % a 20 % de locales de comida han adoptado estas medidas.