La selección española de baloncesto supo controla a la figura griega de Giannis Antetokounmpo y se impuso 84-77.
España encontró el camino para minimizar el impacto de la superestrella Giannis Antetokounmpo y batió 84-77 a Grecia este martes en Lille, relanzando sus opciones en el torneo olímpico de básquet masculino.
Era una 'final' entre los perdedores de la jornada inicial del Grupo B y sobrevivió la Familia, que perdió a su capitán, Rudy Fernández, en el último cuarto por una mala caída. Tuvo que salir, mareado, ayudado por el personal médico.
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¿Cómo controlar a una fuerza de la naturaleza dominante en la NBA? Las opciones de España pasaban por evitar que se desatara la tormenta, agitada desde la primera fila por su hermano Thanasis, compañero en los Milwaukee Bucks y fuera de la lista griega en estos Juegos. Tras firmar 34 puntos en el debut, esta vez se quedó en 27.
El plan del seleccionador español, Sergio Scariolo: mantener jugadores frescos en su marca y utilizar a los otros cuatro en las ayudas.
Destacó su primera pareja de baile, un Santi Aldama muy aplicado que forzó dos faltas de la estrella.
En ataque el pívot de Memphis Grizzlies fue de nuevo el sostén anotador tras lograr 27 puntos en la derrota inaugural frente a a Australia (92-80). Esta vez aportó 19.
Tras un primer cuarto a remolque, la tela de araña defensiva española empezó a dar sus frutos y dio un primer tirón en el marcador mediado el segundo, tras un triple del eterno Rudy, abucheado por el público francés cada vez que recibía el balón, pasando facturas de batallas pasadas.
Definitivamente España estaba más engrasada. Apretaba en defensa y circulaba con velocidad en ataque, lo que le conseguir opciones de tiro claras, acompañada de un elevado acierto.
Mención especial para el 'microondas' Sergio Llull, tres triples en la primera parte desde el banquillo, y Jaime Pradilla, que no jugó ante Australia y aportó siete puntos sin fallo antes del descanso (49-35).
'Anteto' se bastó en la segunda parte para mantener a su equipo con opciones. Con un mate estratosférico igualaba el partido a falta de cuatro minutos (71-71).
Mientras Rudy entraba en los vestuarios con la espalda bloqueada, la Roja no se amilanó. Aldama se vistió de líder y con un par de canastas puso a su equipo ocho por encima con dos minutos por jugar.
A falta de 20 segundos, con España tres por arriba, 'Anteto' tuvo un triple para empatar pero falló.
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