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Tres ecuatorianos destacaron en la fase de liga, uno clasificó directo a octavos y dos estarán en los playoffs.
La fase inicial de la Champions League ha llegado a su fin, y con ella, un capítulo especial para el fútbol ecuatoriano. Cada vez más jugadores nacionales son protagonistas en las competiciones europeas, consolidando su presencia en equipos de primer nivel y demostrando que el talento ecuatoriano está en auge.
En esta edición, Piero Hincapié con el Bayer Leverkusen, Willian Pacho con el PSG, Joel Ordóñez con el Brujas, y Ángelo Preciado con el Sparta Praga fueron los representantes nacionales que compitieron en la fase de grupos del torneo más prestigioso de clubes.
Si bien hubo contrastes en sus desempeños y resultados, su presencia en sí ya es un indicativo de que el fútbol ecuatoriano sigue exportando talento a las mejores ligas del mundo.
El Bayer Leverkusen de Hincapié consiguió una clasificación directa al terminar en la sexta posición. A pesar de que el ecuatoriano no pudo jugar el último partido por expulsión, ha sido fundamental en esta campaña para su oncena.
Su equipo sigue siendo una de las grandes revelaciones de la temporada y se mantiene como un contendiente serio en Europa.
Por su parte, el PSG de Pacho y el Brujas de Ordóñez se salvaron de la eliminación y lograron avanzar a los playoffs de la Champions League tras ubicarse en los puestos 15 y 24, respectivamente.
Si bien ambos defensores ecuatorianos cometieron autogoles en sus respectivas llaves en la última jornada, su participación en el torneo reafirma que son jugadores con proyección en el ámbito internacional.
Por algo Pacho es el jugador que más balones recuperó en la fase de liga de la Champions y Joel Ordóñez sigue despertando el interés de grandes clubes de Europa, como la Juventus.
En el caso de Ángelo Preciado, su equipo, el Sparta Praga, no pudo avanzar y quedó eliminado con apenas cuatro unidades en la clasificación. Sin embargo, su participación en la Champions es un reflejo de la confianza que los clubes europeos están depositando en los futbolistas ecuatorianos.
Hace unos años, era impensado ver a varios ecuatorianos disputando la Champions League en equipos competitivos. Hoy, no solo están presentes, sino que son piezas clave en sus clubes.
El crecimiento del nuestro fútbol no solo se mide en la cantidad de jugadores que llegan a Europa, sino en su protagonismo dentro de los torneos de élite.
A medida que más jugadores ecuatorianos se consoliden en el extranjero, la selección nacional también se verá beneficiada con una mayor experiencia internacional y un nivel competitivo superior. La tarea ahora es seguir formando talento en casa, garantizando que esta tendencia no sea un episodio aislado, sino el inicio de una nueva era dorada para el fútbol ecuatoriano.
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