Botafogo, a las puertas de su primera final de Copa Libertadores
Salvo una catástrofe, el Botafogo sellará el miércoles su primera clasificación a la final de una Copa Libertadores, cuando visite a Peñarol en Montevideo.
Salvo una catástrofe, el Botafogo sellará el miércoles su primera clasificación a la final de una Copa Libertadores, cuando visite a Peñarol en Montevideo en la vuelta de semifinales de la edición 2024 del torneo continental.
El 'Fogao' prácticamente sentenció la llave en la ida, el miércoles pasado, cuando en el estadio Olímpico Nilton Santos de Rio de Janeiro goleó a Peñarol por 5-0 con un segundo tiempo fantástico, en el que sacó a relucir su amplia gama de fútbol ofensivo.
"Tuvimos una gran actuación en el primer partido y logramos un gran resultado, pero sería un error pensar que ya estamos en la final", dijo el DT del Botafogo, Artur Jorge, pese a que la diferencia entre ambos equipos fue abismal.
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Sin embargo, cuenta con cinco jugadores con dos amarillas -el portero John, el defensa Alex Barboza, el volante Gregore y los delanteros Luiz Henrique e Igor Jesus- que si reciben una nueva amonestación serán suspendidos y, en el casi seguro caso de ganar la llave, se perderán la final, por lo que prescindiría de ellos salvo del arquero.
Nada hace prever que Peñarol pueda revertir la diferencia -nunca en la historia de la Libertadores se logró remontar cinco goles- e impedir que Botafogo se clasifique por primera vez a la final de la Copa, en su tercera participación en semifinales y primera desde 1973.
Incluso, el entrenador de Peñarol, Diego Aguirre, asume que es imposible avanzar a la final, a la que el equipo charrúa, cinco veces campeón de la Libertadores (1960, 1061, 1966, 1982 y 1987), no llega desde 2011.
"Tenemos que jugar de manera digna e intentar ganarlo. Hay que tratar de asumir el golpe y tratar de salir con la mejor fuerza posible, porque la gente nos va a acompañar y tenemos que darle una victoria", dijo Aguirre.
Sin hinchas de Botafogo
Debido a los serios incidentes que se registraron en Rio de Janeiro el miércoles, horas antes del partido de ida, y por el que permanecen detenidos en esa ciudad una veintena de hinchas de Peñarol, el ministerio del Interior de Uruguay prohibió la presencia de seguidores de Botafogo en la revancha.
Unos dos mil 'torcedores' del equipo carioca tenían previsto asistir al juego.
En un comunicado enviado el lunes al presidente de la Federación Uruguaya, Ignacio Alonso, ese ministerio le informó que el partido de vuelta "se disputará únicamente con público de la parcialidad local, es decir, parciales de Peñarol".
"Esta decisión responde al análisis de la Policía Nacional, tras los hechos de violencia ocurridos en Rio de Janeiro en la previa de la semifinal de ida, los cuales son de público conocimiento", prosigue el comunicado firmado por el ministro del Interior, Nicolás Martinelli.
"Los acontecimientos ocurridos en Rio de Janeiro desencadenaron una serie de sucesos que aumentan el clima hostil, que no hacen más que poner en evidencia el alto riesgo que supone la disputa de (la revancha) con ambas parcialidades. Se solicita que se realicen las gestiones pertinentes ante la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) de lo resuelto por esta Secretaría de Estado", finaliza.
El encuentro se disputará en el estadio Campeón del Siglo, en Montevideo, desde las 19H30 con el arbitraje del chileno Piero Maza, secundado en las bandas laterales por sus compatriotas Claudio Urrutia y Miguel Rocha.
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