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Las muelas del juicio deben retirarse cuando presentan molestias
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Foto referencial de dolor de una muela del juicio.( )
Las muelas del juicio pueden ser una pesadilla. Se trata de las últimas muelas que aparecen en la boca y pueden provocar malestar porque en muchas ocasiones no alcanzan en la cavidad bucal y empujan a los demás dientes y muelas.
¿Cuándo es necesario extraer las muelas del juicio?
Los especialistas recomiendan la extracción de las muelas del juicio cuando aparecen mal alineadas en los maxilares y suponen un riesgo para la dentadura.
Otros odontólogos recomiendan retirar los molares en toda ocasión, para evitar futuras complicaciones. En esos casos recomiendan haber alcanzado al menos los 18 años de edad.
Alejandra Cisneros cuenta que cuando tenía 19 años le sacaron las muelas del juicio porque sentía un dolor en la zona que se desplazaba hacia la cabeza. Su odontólogo de cabecera le recomendó realizarse una radiografía y visitar un cirujano maxilofacial para que decida la necesidad de realizarse una cirugía.
El especialista le explicó que deben extraer las muelas con una intervención quirúrgica, caso contrario presentaría molestias de mayor magnitud.
Síntomas que indican problemas con las muelas del juicio
De acuerdo con el centro de salud estadounidense, Mayo Clinic, algunos síntomas son:
- Encías enrojecidas- Encías sensibles- Dolor en la mandíbula- Hichazón alrededor de la mandíbula- Mal aliento- Un sabor desagradable en la boca- Dificultad para abrir la boca
De cualquier manera, es recomendable acudir al dentista al menos cada seis meses y con mayor razón si presenta algún malestar.
Planificar la cirugía
La cirugía de muelas del juicio amerita mínimo 48 horas de reposo absoluto, dependiendo del traumatismo y el grado de dificultad de la misma. Por lo que es vital que se practique en días que el paciente tenga la disponibilidad de descansar.
La odontóloga Dolores Gordón recomienda previamente realizarse una limpieza y eliminación de caries para evitar futuras complicaciones como infecciones.
Después de la cirugía, el paciente debe someterse a una dieta de al menos ocho días que implica evitar los alimentos irritantes: evitar lácteos y derivados, no comer mariscos, cerdo, ni azúcares o golosinas. Tampoco se debe ingerir alcohol o fumar cigarrillo.
Adicional, la dentista indica que las personas deben evitar realizar deporte o trabajo de fuerza.
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